Por qué soy consumada anticomunista

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elsalvador.com

Por Evangelina del Pilar de Sol

2015-06-06 7:00:00

La cúpula ortodoxa comunista del FMLN, cuyos miembros son –(ojo)- militantes del partido comunista salvadoreño, ha dicho que establecerá en el país un sistema socialista, agregando posteriormente…, ¡no radical!

Finalmente, ese grupo sectario marxista se ha destapado, pero engañando, endulzando el oído de muchos ingenuos que, increíblemente, les están creyendo lo de “no radical”.

Para que se conozca cómo funcionan los fines trazados del comunismo hacia el establecimiento de un gobierno comunista en un país, debemos conocer que el socialismo es el primer paso para ir consolidándolo. Un socialismo solapado, “piano, piano”, para no asustar, para no alarmar, para no preocupar. 

Uno de ellos dijo ahorita: “No debe satanizarse el socialismo”. Antes, los mismos habrían dicho: “No debe satanizarse a Venezuela”. 

Pero lo que callan, es que para instaurar el comunismo es necesario inicialmente construir el socialismo, por eso han anunciado ya, esa primera etapa de su plan… el socialismo. 

En Europa hay gobiernos socialistas con un socialismo no radical, pero éstos, patrióticamente, rechazaron el comunismo porque vieron su fracaso en varios países, el horror que causa al pueblo, a sus habitantes. Como ejemplo está España con el partido socialista PSOE, al que los comunistas acusan de venderse a USA. 

Aquí, la cúpula marxista del FMLN, engañosamente intenta hacer creer y engatusarnos que seguirán el sistema socialista europeo. Pero todo es parte de un plan diabólico. 

Mienten en cuanto a que, realmente, en meses recientes anteriores, han seguido como chicle pegados a Venezuela, defendiendo al déspota Maduro y respaldándolo en todas sus barbaridades contra los derechos humanos del pueblo, de la oposición, apadrinando desvergonzada y públicamente, su sistema tiránico-dictatorial-comunista-Siglo XXI. 

Abran los ojos salvadoreños. Sepan que el comunismo necesita primero del socialismo para alcanzar sus metas. Para llegar al comunismo hace falta el socialismo para crear las bases para canalizarlo.

Eso se consigue sometiendo a la democracia que denominan “reaccionaria”, erradicando la hegemonía del sistema democrático. Demandan sacar a la sociedad de lo que llaman “primitivismo modernizado”, o sea el libre mercado y la libre competencia, que paradójicamente es el “primitivismo” que buscan en Estados Unidos nuestros millones de emigrantes, que lo prefieren para vivir y no el comunismo cubano o venezolano, pues no se van para allí.

Socialismo implica socialización de los medios de producción, el comunismo –como paso POSTERIOR– implica la abolición de las clases sociales opuestas (ej. Venezuela) y el nivel social basado en la producción colectiva. Así, para llegar al comunismo se necesita construir el socialismo. El socialismo es el atajo delantero del comunismo. 

El socialismo es, en síntesis –en su doctrina o práctica- el que promueve la posesión pública de los medios de producción y su administración. El comunismo, en otra instancia, es la sociedad en la cual no existe ni la propiedad privada de los medios de producción, ni las clases sociales. De allí el anuncio hecho recientemente por personeros del FMLN, que la industria cafetalera debe destruirse, por ser la responsable del nacimiento del “libre mercado y libre competencia”, capitalismo. Libertades que deben abolirse. 

Salvadoreños, somos país creyente en Dios. El comunismo es ateo y considera a Dios “el opio del pueblo”. 

La Virgen María en Fátima en el momento en que triunfara la revolución comunista en Rusia, octubre 1917, profetizó en sus mensajes: “Rusia esparcirá sus errores por el mundo” ¡Y vaya que lo hizo!

No dejemos que 100 años más tarde nos destruyan como a Venezuela y Cuba. 

*Columnista de El Diario de Hoy.