Sufrimiento existencial

descripción de la imagen

Vanessa Vásquez, durante un entrenamiento pasado con su hermano Byron.

/ Foto Por EDH/Archivo

Por Por Mario Aguilar Joya*

2015-04-24 5:30:00

El término sufrimiento existencial se refiere a la crisis que sufren las personas como seres individuales o como grupos, cuando son enfrentados con eventos que los llevan a cuestionar la razón de su existencia y los motivos para seguir viviendo. Estos incidentes suelen ser en su mayoría acontecimientos catastróficos, trascendentes y de severidad tal que alteran los mecanismos de autocontrol interno que forjan el instinto de autopreservación y deseo de sobrevivencia de los individuos o de los colectivos de personas.

Es un concepto que nace del existencialismo, corriente filosófica que propone que el conocimiento de la realidad se fundamenta en la experiencia de cada uno de nosotros con su entorno y que todo esto tiene como objetivo analizar el significado de la vida misma como fin último.

Posibles detonantes de crisis existenciales son por ejemplo aquellos jóvenes que estudian carreras universitarias, se gradúan con gran esfuerzo, solamente para darse cuenta que no pueden obtener trabajo en el mercado laboral y que tienen que pasar a formar los grandes conjuntos de desempleados o subempleados.

En otras ocasiones, una crisis también puede provenir cuando la persona hace un balance de su vida y se da cuenta de que no ha podido alcanzar las metas que se había propuesto temprano en su vida. Las circunstancias de límites extremos, lo constituye sin lugar a dudas, la pérdida de un ser querido; de estas la muerte de los hijos es la situación más devastadora. Escenarios lamentablemente tan comunes en nuestra realidad nacional.

En el caso de los grupos de personas tenemos históricamente el soportado por poblaciones enteras como los judíos ante el exterminio sistemático al que fueron expuestos durante la última gran guerra del siglo pasado. Definitivamente, no necesitamos ir muy lejos para llegar a la conclusión que nuestra población actualmente está sometida a una vorágine de violencia irracional que nos hace preguntarnos repetidamente sobre la sensatez y cordura del diario vivir salvadoreño. Es una sociedad que adolece de una crisis existencial y algunas personas padecen de sufrimiento existencial, problema que nos afecta a todos y que se ha vuelto una realidad que ha motivado a la migración de un porcentaje cada vez mayor de la población.

Las personas que adolecen sufrimiento existencial tienden a sentirse permanentemente desanimados, desmoralizados y vacíos; atraviesan por tristeza, depresión y estados de ansiedad que les desencadena temores relacionados con la muerte de ellos o de sus familiares más cercanos. Las personas que se encuentran a su alrededor puede que no se den cuenta de su problema, aun cuando ellos sufran del mismo inconveniente. No se percatan de que necesitan ayuda profesional.

El sufrimiento existencial afecta profundamente los principios, creencias, motivaciones, objetivos y sentido de la vida de las personas, pero su mayor impacto llega cuando despoja de la esperanza a los que la sufren. Pese a esto, debemos tener presente que aun cuando nos consideremos seres humanos oprimidos por la crisis y estemos ante el espectro del sufrimiento existencial, también tenemos que valorar que el renunciar a la esperanza es desistir a la vida. Como individuos y como sociedad el abandonarnos a la desesperanza es definitivamente un camino que no debemos recorrer.

*Doctor en Medicina.

aguilarjoya@yahoo.com