El tercero en disputa

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elsalvador.com

Por Por Carlos Alberto Guzmán*

2015-02-05 5:00:00

La clave dentro de la Asamblea Legislativa está en el tercer partido, es decir, aquella fracción legislativa que se ubica después de ARENA y FMLN en la cantidad de diputados; eso lo confirman los estudios de Ciencia Política y el acontecer cotidiano del Congreso. Por tanto, el uno de marzo le invito, lector, a unirse a la renovación de la política mediante su voto, cuando lo que debe hacer es votar por los candidatos renovadores de los partidos políticos grandes y por los candidatos decentes de ese futuro tercer lugar. Nuestro voto hará la diferencia por esas buenas personas que se atreven a incursionar en política.

Representantes de ARENA y FMLN han expresado que sus partidos han realizado prácticas antiéticas y oscuras, tales como clientelismo o cooptación de instituciones públicas, a cambio de la gobernabilidad legislativa. Sea cierto o no, esa es la excusa perfecta para todos los partidos, porque unos se libran de la responsabilidad política de sus actuaciones, y otros carecen de vergüenza e ignoran dicho reclamo. Esto lo hemos visto en numerosas ocasiones, y el mejor ejemplo es la repartición de cargos en la Corte de Cuentas de la República.

El fenómeno del tercer lugar tiene muchas explicaciones, desde razones históricas hasta justificaciones legales por el sistema de cocientes y residuos, de tal manera considero que esto no cambiará para el período 2015-2018, a pesar del mecanismo de “voto cruzado” y la llegada de nuevos partidos y candidatos. En el pasado, el PCN se benefició de la tercera posición legislativa y, de esa forma, acompañó a ARENA en muchas de las iniciativas del partido gobernante de aquella época. Recientemente, el tercer lugar es ocupado por GANA y por ello ha sido el aliado clave del FMLN para aprobar leyes y préstamos. Incluso; este partido se promociona públicamente como el partido que aprueba las principales políticas sociales del Gobierno.

Un elemento clave de la renovación política debe ser la decencia de las personas, porque en El Salvador no es garantía de una buena gestión el mero cambio de partido en el Gobierno (central o municipal) o la elección de políticos más jóvenes. Por ello, le propongo, lector, que nos sumemos a la mayoría ciudadana que quiere un mejor país y apoyemos dos tipos de candidatos: primero, aquellos que promueven el cambio dentro de ARENA o FMLN; y segundo, los candidatos decentes que provengan del resto de partidos, a pesar del historial que puedan tener sus partidos.

De esa forma, lograremos un doble efecto transformador de la Asamblea: por un lado, tendremos más diputados decentes y, por otro, habrá una tercera fuerza legislativa decente con la cual ARENA y FMLN podrán negociar y tomar decisiones, sin recurrir a prácticas antiéticas y oscuras.

Soñemos que podemos cambiar nuestro país y actuemos en razón de ello. El uno de marzo tendremos la oportunidad de apoyar a los candidatos decentes que se han atrevido a involucrase en política y que, durante los próximos tres años, tendrán que decidir sobre nuestras pensiones, la deuda pública del Estado, los impuestos que pagamos, los funcionarios a cargo de la Fiscalía General y de la Corte Suprema de Justicia, entre otras instituciones. Por todo ello, muchos vamos a votar de esa manera y le invito a que usted también lo haga.

*Abogado y politólogo.

@lapapaguzman