Del evento anti-vida en un museo

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Foto Por edhdep

Por Por Mónica Suriano*

2014-10-16 5:00:00

Estoy en profundo desacuerdo que una institución como Marte, que promueve el arte, la verdad, la vida y la belleza humana, haya promovido recientemente un evento de dolor, de muerte de inocentes y de los valores más sagrados: la vida, la maternidad (biológica o adoptiva) y el derecho de nacer.

Marte siempre han sido una institución en la sociedad y cultura de El Salvador del arte y la belleza. Y la mejor opción para una madre que no puede mantener su bebé, es que haga el bien y por que no, lo bello, buscando ayuda en una Ong o en una institución, y dependiendo del caso, que pueda entregar su hijo en adopción o a un orfanato. Muchos hombres y mujeres han sido adoptados y fueron gente de bien. Lo que se debe hacer en una sociedad es luchar que hayan mejores posibilidades para las mujeres y mejores orfanatos, con una cultura de amor y no de odio a un ser viviente.

El aborto es promovido por organizaciones y personas, y uno de sus motivos es obtener las riquezas en los países desarrollados y no darle nada a los países sub-desarrollados. Estas instituciones y personas caen en la autosuficiencia de TODO, y en vez de contribuir a los países sub-desarrollados con programas que promuevan el desarrollo de la persona, de la familia y de la sociedad, contribuyen a promover el aborto, esclavizando a los países pobres con movimientos de auto-suficiencia y con patrones destructivos para el desarrollo integral del ser humano. Sin dar nada de dinero para organizaciones de desarrollo humano, familiar, profesional y social.

El aborto promueve una autosuficiencia tremenda en la mujer, en el hombre y en la sociedad en general, provocado por un falso uso de libertad, una libertad individualista mal guiada, no hacia el bien, sino hacia el mal. Además de esta autosuficiencia, deja un vacío interior que nada lo llena porque se ha acudido a un crimen irreversible, que es la muerte de un hijo o una hija. Reaccionemos y no promovamos esta autosuficiencia hacia el mal que promueve el aborto en las personas y en la sociedad.

Las causas de un aborto es una profunda herida y dolor en la madre y el padre que cargan toda su vida, serias depresiones en algunos casos con pensamientos de suicidio, ansiedad, adicciones, por nombrar algunas. Todo esto se puede evitar en el futuro para salvadoreñas y salvadoreños si hacemos lo correcto desde ahora, mejorar el sistema de adopción y no acudir a la muerte, al aborto. ¡Necesitamos mejores orfanatos! ¡Muy bien! ¡Hagámoslos!

Pero no esto, no el aborto. Muchas mujeres que han abortado se han hecho grandes líderes y promotores de la vida, gracias a su testimonio han informado a personas con la verdad y han salvado a muchas vidas. Si ya sabemos el resultado y el fracaso del aborto, se debe de informar antes que suceda y promover la causa pro-vida en los “techos de las casas” si es necesario, como decía San Juan Pablo II.

En un país donde hay tanta violencia, quieren traer más violencia y peor aun, violencia entre una madre y un hijo o hija. La Madre Teresa de Calcuta, gran abogada de la vida y fundadora de muchísimos orfanatos en el mundo entero decía: “El aborto mata la paz del mundo… Es el peor enemigo de la paz, porque si una madre es capaz de destruir a su propio hijo, ¿qué me impide matarte? ¿Qué te impide matarme? Ya no queda ningún impedimento”.

Que pare la violencia y que haya paz, solidaridad y verdadero progreso (un progreso sostenible, verdadero e integral) hacia el bien en nuestros corazones, en nuestras familias y en nuestro país. Se debe ayudar y facilitar el apoyo al verdadero desarrollo humano de cada salvadoreño. No lo contrario, hundirlo y promover el odio y la falta de solidaridad entre salvadoreño y salvadoreña.

Hay que iluminar el camino, ser verdaderos lideres, apasionados por la verdad, la justicia y la misericordia en El Salvador, por la salud física, mental y espiritual de todos los salvadoreños porque o sino, no sabemos adónde pararemos y el rumbo que tomará El Salvador si no lo llenamos de paz, solidaridad y esperanza. ¡Que Dios bendiga a nuestro querido país! Viviendo valores que nos hacen únicos.

*Colaboradora de El Diario de Hoy.