La persecución actual contra los cristianos

descripción de la imagen
Foto Por La Voz Argentina

Por Por Oscar Rodríguez Blanco, s, d, b.*

2014-07-25 6:00:00

La vida para los primeros cristianos en el siglo I no fue nada fácil. Estuvieron sometidos a muchas persecuciones. El martirologio romano contiene gran cantidad de mártires que ofrendaron sus vidas en defensa del evangelio.

Las primeras comunidades cristianas estaban rodeadas de un entorno que odiaba y perseguía a la naciente iglesia. Esta situación favoreció una gran cohesión y solidaridad real entre ellos. Compartían no solo la fe, compartían todo lo que tenían y vivían muy conscientes de pertenecer a una misma iglesia, la que el maestro Jesús había fundado.

En nuestros días, los cristianos siguen dando testimonio de su fe. El Papa Francisco, celebrando la memoria de los primeros mártires cruelmente asesinados a los pies de la colina del Vaticano por orden de Nerón después del incendio de Roma en el año 64, comentó: “Han sido muchos los cristianos perseguidos en la época de Nerón, pero “hoy no son menos… hoy en día hay más testigos mártires en la iglesia que en los primeros siglos”. Esto es cierto, basta pensar en muchos cristianos que en este tiempo están siendo perseguidos en el Medio Oriente. También tienen que huir de las persecuciones de sus enemigos.

Al inicio de esta semana, muchas familias cristianas en Medio Oriente se vieron obligadas a salir y abandonar sus casas por orden de grupos armados fundamentalistas. La iglesia, atenta a las necesidades de sus feligreses en Irak, ha abierto sus escuelas, jardines de infancia y salones parroquiales, para dar alojamiento a cristianos y musulmanes que han sido amenazados y han tenido que abandonar sus hogares con todas sus pertenencias.

El obispado católico de Mosul ha sido incendiado por los fundamentalistas del Estado islámico de Irak y Levante (ISIL) y se han tomado el monasterio “Mar Behnam”, obligando a los monjes siro católicos a huir del lugar. Esto ha puesto en alerta a los cristianos de otros lugares cercanos. El obispo se ha convertido en un refugiado más, y junto a él, se escaparon unos cinco mil cristianos y cientos de miles de musulmanes. Todos los que han huido han perdido la esperanza de un futuro mejor en este lugar.

La organización “Puertas Abiertas”, grupo no confesional, dice que en unos 65 países del mundo, se persigue a los cristianos, y que ya son 100 millones, los que se sienten perseguidos. El cristiano está llamado a dar razón de su fe, pero no es justo que se les persiga por querérseles imponen sistemas políticos o ideologías que chocan con sus convicciones cristianas. Los perseguidos huyen a lugares donde no existe energía eléctrica, ni agua potable, en donde el sol es abrazador y se ven envueltos a cada momento por remolinos de polvo, y como dijo el representante de la ONU para Irak, Nickolai Mladenov al ver el campamento de refugiados: “Esto es tragedia humana”.

Vivimos en un país, en donde muchos han dado testimonio de su fe incluso con el martirio. Su testimonio sigue siendo muy válido. Las cosas han cambiado, nadie nos impide dar culto a Dios, pero, no olvidemos a esos cristianos que muy lejos de nosotros, nos dan ejemplo de fidelidad a Dios. Agrada a Dios el sencillo testimonio de una vida de fe coherente y comprometida.

*Sacerdote salesiano.