El ciclo Mourinho

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elsalvador.com

Por Por Eduardo Torres*

2013-05-11 5:00:00

En mi calidad de “merengue de corazón”, de aficionado de pura cepa del Real Madrid, siento que el ciclo Mourinho ha llegado a su fin. Espero que sea así. Quedando tan sólo la posibilidad de obtener la próxima semana el premio de consolación, la Copa del Rey, tras haber perdido la liga y ser eliminados en semifinal de Champions, no es por resultados deportivos por lo que pienso ya no debe continuar el controvertido técnico al frente del equipo que sigo semana a semana, pues en el deporte se gana y se pierde. Ha sido el trato a Iker Casillas, capitán del equipo, la gota que rebasó el vaso para el madridismo en general y para mí en lo particular.

Mourinho es uno de los mejores entrenadores del mundo y puede concedérsele que su carácter le ayuda a manejar los grandes egos que existen entre algunos de los multimillonarios jugadores de los clubes élite del fútbol mundial. Pero como que no aprendió en su vida que lo cortés no quita lo valiente. Siendo él, como dijo hace un par de días en rueda de prensa, el entrenador del equipo es su decisión quién juega y quién no. Diego López es un buen portero y un disciplinado profesional que ante la lesión de Iker fue recontratado; la confianza que le dio Mourinho y los compromisos del Real Madrid en Champions, liga y Copa del Rey lo han hecho mejor portero de lo que era cuando se fue del Madrid. Ese tampoco es el punto de discrepancia.

Han sido las embestidas y el desprecio hacia el gran capitán, un ejemplar deportista querido y admirado alrededor del mundo, lo que ha desatado la guerra en el vestuario del Real Madrid que más allá de ser un club de fútbol de más de cien años, es una franquicia a nivel mundial. No se puede ni se debe pisotear los símbolos de estos grandes clubes sin costo alguno, llámense Real Madrid, Barcelona, Manchester United, Bayern Münich, Juventus o Milán. Trasciende lo deportivo y ofende a las instituciones, incluyendo por supuesto a los aficionados, que son las que le dan vida y fortalecen a estas grandes franquicias de alcance global.

Y claro, las ofensas traen siempre reacción.

Desde Kaká, que nadie duda de su indiscutible calidad pero llegó lesionado al Real Madrid y no ha estado al nivel que se esperaba en parte porque no se le ha encontrado puesto en el equipo desde que salió de su grave lesión deportiva. Pasando, por otro lado, a favoritismos absurdos como el de Carvalho. Cierto es que Mourinho ha hecho de “los merengues” un mejor equipo del que encontró, pero también ha contratado a quien ha querido. Insisto, discutibles son sus aciertos como sus desaciertos deportivos, eso siempre es así en un club de fútbol como el Real Madrid o cualquiera de los otros mencionados con anterioridad, en los cuales hay presión para rendir desde el día uno.

Pero un buen grado de humildad no le cae mal a nadie, por lo cual hay que buscarla porque vaya que si cae mal el carecer de ella. Hay que pedir a su vez la virtud de saber identificar cuando se llega a un fin de ciclo para hacer las cosas con naturalidad, sin aspavientos. Esto es lo que no está haciendo Mourinho desde que empezó a visitar Londres con frecuencia antes de ser eliminados en Champions. Hasta arrasar ahora a quien alza su voz como Pepe.

Gracias por todo “Mou”, buena suerte en tu próximo destino.

*Director Editorial

de EL DIARIO DE HOY.