Libertad de prensa y el rol de los medios

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elsalvador.com

Por Por Linda Cross *

2013-05-02 6:03:00

Alguien me dijo una vez que “la libertad de expresión significa poder decir lo que uno quiera sin el riesgo de sufrir consecuencias”. No creo que eso sea cierto, ya que pagué el precio estando en otra misión internacional. Me entrevistó uno de los principales periódicos acerca de la libertad de expresión, la cual se encontraba amenazada en esos momentos en ese país. Cité varios comentarios de expertos, incluyendo a Andrew Pudephatt, un comentador muy conocido en dichos asuntos. Desafortunadamente, cuando la periodista imprimió el artículo, omitió mencionar que lo había citado a él. Así que sonó como si yo estaba diciendo, por ejemplo, que el país X no necesitaba una ley de comunicaciones. No me correspondía expresar una opinión pública acerca de eso, tal como me lo dijo el Ministro de Relaciones Exteriores. Tuve que ir al Ministerio y explicar lo que había sucedido. Aceptaron mi versión, en parte porque no respetaban a los medios y me advirtieron de no confiara mucho en la prensa.

Estuve pensando en el rol de los medios, particularmente los medios digitales y sociales, el día en que el sitio de la AP fue hackeado con tuits acerca de explosiones en la Casa Blanca. Parece que hemos llegado a una situación en la que todo lo que leemos en Twitter instantáneamente se vuelve realidad y los mercados ciertamente reaccionaron con suficiente rapidez sacando –temporalmente– billones de acciones. Entonces, ¿hay un rol legítimo para los medios digitales y sociales? Yo creo que sí. Acabo de volar del nido de la Embajada en Twitter y ahora estoy tuiteando por cuenta propia. Es mucho más personal y he tenido más intercambios con individuos en estos últimos días que en todo el año bajo la cuenta de la Embajada.

Un reporte reciente de la UNESCO sobre el tema que comento: “El ambiente de las comunicaciones ha sido transformado por la habilidad de convertir diferentes tipos de información a códigos digitales, accesibles por un rango de dispositivos desde la computadora personal hasta el teléfono móvil. La llegada del Internet ha transformado la capacidad de comunicación desde algo localmente esencial ha algo mediano que es verdaderamente global”. O como alguien bien lo dijo, todos somos reporteros informando en tiempo real, tuiteando en reuniones, conferencias y eventos, con los medios motivándonos a hacerlo. Quién ha respondido alguna vez a la petición de la BBC al final de un artículo en su página web: “¿Estás ahí? Mándanos tus comentarios y fotos”. ¡Lo hice una vez y nada pasó!

Ese tipo de poder viene con una gran responsabilidad para asegurar que la información sea veraz, oportuna y relevante. No hay punto en tuitear basura que nadie más quiere leer. Así que tiene que haber cierta auto-regulación. Twitter ayuda en una manera por limitarnos a 140 caracteres y he visto horrores en donde los tuiteros han usado todas las herramientas existentes para mandar el mensaje. Algunas toma tiempo descifrar.

Hay dos principios importantes si aceptamos que la auto-regulación es una alternativa necesaria al control estatal de los medios. Primero, todos los medios de comunicación tienen la obligación de respetar a cambio de la libertad de la interferencia del Estado. Segundo, dichas obligaciones deberían ser explícitas y transparentes, y ser objeto de informes periódicos bajo la esfera pública. Ambas condiciones son esenciales si la auto-regulación es para proteger la libertad de expresión y no sólo los intereses de compañías. Con los medios digitales, todos somos reporteros y debemos respectar esos principios también.

*Embajadora del Reino Unido

en El Salvador.