Desde los 25 años, Alfredo Atanacio Cáder supo que había nacido para ser un emprendedor y se lanzó a la aventura de iniciar un negocio propio. Sus comienzos como emprendedor se remontan a 2009, año en el que fundó su empresa UASSIST.ME, para proporcionar servicios administrativos virtuales a clientes alrededor del mundo.
El joven empresario mencionó que con estas iniciativas demuestran que desde El Salvador se puede perfectamente aprovechar las economías de otros lados del mundo sin necesidad de migrar.
“Fue entre aventura y pesadilla”, dice, mientras recuerda los obstáculos que tuvo que vencer para establecerse como empresario.
“En realidad nos fue supermal, nadie quería el servicio, ni siquiera gratis, entonces fue toda una aventura convencer a la gente”, añade.
Ocho años después, y tras muchas horas de esfuerzo y trabajo, Atanacio está al frente de otros dos proyectos: Point, que es un centro de negocios para emprendedores en una red global que está presente en más de 90 ciudades en el mundo; y Live, que es un edificio habitacional de “coliving” para jóvenes estudiantes y empleados , que está en pleno centro histórico de San Salvador.
En menos de una década, pasó de tener cuatro empleados a una planilla de 165 colaboradores, y ha hecho su pasatiempo el ayudar a jóvenes que, como él, quieren iniciar un negocio propio.
“Lo más interesante de ser un emprendedor es que uno puede ser el arquitecto de su propia vida, y uno puede causar bastante impacto en su entorno, y no necesariamente el entorno es geográficamente inmediato, sino que puede ser incluso fuera de las fronteras”, enmarca el joven empresario.
“Todas las semanas tengo reuniones con emprendedores que me contactan porque quieren hablar de sus ideas de negocios; que yo les dé consejos o que les revise sus planes. A mí me gusta mucho y, de verdad, todas las semanas hablo con bastantes emprendedores y me comienzan a contar su historia”, agrega.
Y es ese interés en apoyar a los jóvenes emprendedores lo que lo llevó a formar parte de la Junta Directiva de la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador y a dirigir la Comisión de Emprendimiento de esta gremial empresarial.
Esta tiene bajo su responsabilidad el fortalecimiento de EmprendES, un programa que la gremial ejecuta desde 2014 y que apoya a emprendedores que buscan establecer una nueva empresa. Por medio de este programa, Alfredo también colabora con los jóvenes que buscan orientación para lanzarse a la aventura de emprender.
Esta vez tendrá esa misma oportunidad durante el XIII Encuentro Anual de Jóvenes (EAJ), denominado “Aprende y Emprende”, un evento de gran impacto en el país y que, año con año, la gremial organiza para la semilla del emprendimiento en la juventud salvadoreña.
EmprendES tiene cuatro ejes de apoyo para los emprendedores: sensibilización, validación, concurso EmprendES e incubación y vinculación con fuentes de financiamiento.
Este último incluye contactos con posibles inversionistas, fuentes de crédito y proveedores de capital semilla para comenzar un nuevo negocio.
En el XIII Encuentro Anual de Jóvenes Atanacio compartirá parte de su historia con los jóvenes, para que estos comprueben que aun en los fracasos puede haber grandes oportunidades.