Seducida por el mercado salvadoreño, la guatemalteca Calidad Inmobiliaria está dispuesta a seguir invirtiendo en nuestro país, más allá de ir a otros mercados centroamericanos. La firma llegó al país hace siete años atraída por las estrechas relaciones de negocios que existen entre El Salvador y Guatemala.
La semana pasada, la firma inició las obras de su segundo desarrollo en territorio salvadoreño, después de Avante, un edificio corporativo que fue inaugurado en 2012 en la zona de Santa Elena. Se trata de la Torre Insigne El Salvador, que será ejecutada con una inversión que supera los 30 millones de dólares y cuya inauguración está prevista para finales de 2017, informó Rafael Monzón, el CEO de Calidad Inmobiliaria.
Con Avante, la firma introdujo el concepto de centro de negocios, y con Insigne busca propiciar la colaboración porque está diseñado para “networking” y sumar relaciones corporativas, gracias a que tendrá espacios comunes para que los inquilinos puedan trabajar en ambientes más informales y relajados.
En ocasión de la colocación de la primera piedra, Monzón fue claro al decir que la apuesta para este año seguirán siendo los mercados guatemalteco y salvadoreño. Sin embargo, la compañía siempre tendrá sus ojos puestos en otros mercados de la región, como Honduras, Nicaragua y Costa Rica.
“Desarrollar un proyecto es un proceso que puede llevar entre 3 y 4 años, aunque este año podríamos seleccionar ese nuevo mercado en Centroamérica”, afirmó.
Mientras eso ocurre, la firma espera concluir los edificios Insigne El Salvador y Guatemala, los cuales se sumarán a los 19 desarrollos inmobiliarios, entre corporativos, residenciales e Industriales que son parte de su portafolio.
“Nuestros proyectos siempre han tenido éxito en este mercado, y con Torre Insigne vamos por el mismo camino, pues ya está vendida en un 50 por ciento”, expresó Monzón.
Añadió que los compradores de los espacios, que van desde los 50 metros cuadrados, en su mayoría son inversionistas que buscan construir un portafolio de bienes inmuebles que les generen rentas.
El éxito en la comercialización del inmueble, y la facilidad que le han ofrecido las instituciones salvadoreñas en cuanto a permisos y tramitología, ha motivado a la firma guatemalteca en pensar desde ya en ese tercer desarrollo. La zonas visualizadas son La Escalón, Santa Elena y San Benito.
“La zona de San Benito nos ofrece lo que buscábamos: accesibilidad, desarrollo comercial y conectividad, por eso decidimos edificar Insigne aquí”, afirmó.
Monzón adelantó que ese futuro inmueble corresponderá al segmento corporativo, en donde advierte que existe un nicho mercado, pues muchas empresas aún operan en casas grandes.
“Hemos notado que la demanda en San Salvador existe, por eso antes de tener un desarrollo en otro país vamos a tener un tercero en El Salvador, y otros en Guatemala, dado que nuestra infraestructura está en estos dos países”, reiteró.
La firma también está considerando la posibilidad de incursionar en el mercado local con proyectos industriales, pero no así residenciales, pues en ese rubro aún no han evaluado el mercado.
En cuanto al hermano gemelo de Insigne, Monzón dijo que esperan iniciar la construcción en los próximos meses, pues los permisos en El Salvador salieron antes que los de su propio país.
Los edificios hermanos ofrecerán a los inversionistas, la facilidad de hacer negocios en cualquiera de los dos inmuebles, sin incurrir en costos adicionales.
En Guatemala, Calidad Inmobiliaria ha desarrollado como: Edificio Avante, el Complejo Industrial Crece, Distribodegas, Altos de Casa Bella, Torre 360, Urbano y otros.
En la actualidad, otros proyectos que están en proceso en territorio guatemalteco, como las dos torres residenciales Live, la segunda etapa de Crece, con una segunda torre corporativa y el centro comercial Kalú, entre otros.
Mientras que en territorio salvadoreño, la empresa estima que sus inversiones ya superan los 50 millones (con el Edificio Avante e Insigne).