La realidad virtual ha comenzado a viajar más allá del terreno del entretenimiento y los videojuegos, extendiéndose a otros campos, como la arquitectura, la medicina, la arqueología, el entrenamiento militar y hasta en la industria aeronáutica, con las simulaciones de vuelo.
“Definitivamente, 2016 será el año del despegue de la realidad virtual y la realidad aumentada”, afirmó Rodolfo Salazar, director general de Idea Works, una firma salvadoreña especializada en marketing digital, que opera desde 2010.
Esa tendencia marcó la Feria de Electrónica de Consumo (CES), celebrada en Las Vegas, Estados Unidos, el mes pasado, en donde los grandes fabricantes de tecnología exhibieron una serie de dispositivos que permiten disfrutar de esas experiencias sensoriales.
De hecho, este tipo de aparatos, llamados cascos, visores o gafas, fueron considerados la plataforma del mañana, sin embargo, ya se encuentran disponibles en tiendas en línea como Amazon, una vitrina en donde el consumidor puede elegir su modelo preferido, con precios que van desde los $18.
En la oferta de visores se encuentra el “Google Cardboard”, una caja de cartón que permite vivir la realidad virtual con solo colocar dentro un “smartphone”.
“Cardboard”, que fue presentado en la conferencia “Google I/O”, el año pasado, es una de las formas más sencillas de acercar lo virtual a todo el mundo, pues incluso, puede ser fabricado artesanalmente, siguiendo las instrucciones disponibles en Internet.
Una de las compañías, consideradas pioneras en la fabricación de visores, se llama Óculos, que revolucionó el mercado mundial con el desarrollo del casco “Óculus Rift”. En marzo de 2014, la firma fue adquirida por Facebook, lo cual a juicio de Salazar, permitirá dentro de un par de años, visualizar nuestros contactos en 3D.
Los avances de la tecnología virtual ya está siendo aprovechada en el segmento corporativo. Las inmobiliarias, por ejemplo, están dejando de lado las tradicionales carpetas con fotografías, y planos arquitectónicos, y ahora echan mano de la innovación para que sus clientes puedan apreciar con todo lujo de detalles el inmueble, con un simple paseo virtual, comparó.
“Los videos 360 permiten tener una vista completa de escenarios amplios, como conferencias, foros, conciertos, entre otros”, comentó Salazar.
En cuanto a la realidad aumentada, Salazar explicó que es aquella que genera información adicional a nuestro entorno real, a partir de sensores, pantallas, proyectores digitales , e incluso lentes que se pueden colocar en la retina, tal como se observa en las películas.
Este tipo de tecnología, que combina elementos reales y virtuales, se encuentra en plena etapa de desarrollo.