La Asociación Salvadoreña de Aviación General (ASAG) denunció ayer, públicamente, que la aviación salvadoreña “está en crisis”, tras los recientes despidos de personal calificado que la Autoridad de Aviación Civil hizo al final del año pasado.
En un comunicado, la Asociación se mostró preocupada porque la institución haya despedido a personal calificado y con más de diez años de experiencia, dejando a la institución “sin capacidad técnica antes las necesidades de la aviación”, señala el documento de la gremial.
Otra de las acciones que la Asociación señala como atentatorias contra el desarrollo de la aviación en el país es la implementación de un pliego tarifario que, según señala, se aprobó al margen de la Constitución de la República, lo que los ha llevado a interponer una demanda ante la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, con tal de dejar un precedente en la forma cómo se aprobaron.
De acuerdo con uno de los miembros de la Asociación, que prefirió no identificarse, el pliego elevó excesivamente los precios de las licencias y permisos de aviación, sin contar siquiera con un estudio que determinara su impacto.
La gremial también señala que el Consejo Directivo de la AAC, presidido por el coronel René López Morales, no cumplen con los requisitos establecidos por la Ley Orgánica de la Aviación Civil, pues el funcionario no tiene una carrera aeronáutica ni experiencia en el rubro.
Todas estas anomalías, “ponen en riesgo inminente al país de ser categorizado por entidades internacionales tales como la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI) y la Administración Federal de Aviación de los Estados Unidos (FAA)”, señala el comunicado.
Esto afecta las operaciones de las líneas aéreas, talleres y escuelas de aviación, se indicó.
Las exigencias de la gremial aérea coinciden con los señalamientos que hizo hace dos semanas el Sindicato de Trabajadoras y Trabajadores de la Industria Aeroportuaria de El Salvador Similares y Conexos (SITIAPES), que acuerpó a los técnicos de aviación despedidos de la AAC y exigió su reinstalo.
En esa oportunidad, uno de los afectados, Óscar Armando Molina, denunció que con la llegada de López Morales a la institución, se ha despedido a personal calificado y con más de 10 años de experiencia que estaba asignado en labores de vigilancia y aeronavegabilidad, dos aspectos importantes que son considerados como parte de la seguridad de la industria aeroportuaria en el país.
“Había una mística de trabajo en la institución y el coronel López lo ha desbaratado”, recalcó.
El presidente de la AAC, René López, respondió ante estas acusaciones, que los cambios no han afectado el funcionamiento de la institución y agregó que la OACI le ha dado una mejor nota al país desde finales de 2015.