Precios internacionales del café se han reducido $90 en un año

Los contratos de café para entrega en diciembre llegaron a cotizarse hasta en $112 por quintal la semana anterior. Precio local ronda los $75 por quintal.

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El precio del café a nivel internacional ha subido de precio el último año.

/ Foto Por EDH

Por Patricia García

2015-11-22 10:15:00

Una nueva caída en los precios internacionales del café ha vuelto a poner en aprietos al sector cafetalero local, cuyos representantes aseguran que la paga que reciben no logra cubrir ni siquiera sus costos de producción.

El precio del aromático en los contratos a futuro en la bolsa de Nueva York cayó recientemente hasta los $112 por quintal y esta semana se ha mantenido en $115. Este último precio refleja una reducción de $90 respecto a los $205 a que se cotizaba hace un año.

Para los productores del aromático la disminución en los precios del mercado internacional está provocando mayor detrimento al sector.

La cotización internacional es solo una parte del problema para los productores, a eso deben sumarle que por temas de rendimiento, costos de transformación, transporte y demás, en El Salvador no están recibiendo el precio internacional, sino entre $60 y $75 por quintal.

De acuerdo con el presidente de la Asociación de Beneficiadores y Exportadores de Café (Abecafé), Marcelino Samayoa, aunque el precio en el mercado externo sea de $115, el productor tiene descuentos por rendimientos, es  decir que por cada quintal oro del grano (500 libras  uva), se debe verificar el porcentaje de café oro fino, café oro resaca (inferior) y café oro venta local, y basados en estos porcentajes se le da precio al productor.

Según lo explicó el representante de Abecafé, si a la hora de clasificar el grano, al productor solamente le sale la mitad de un quintal en café oro fino, se le hace precio por ese porcentaje y por los demás se le otorga otro precio.

Pero además de ese descuento los cafetaleros tienen que deducir alrededor de $30 por cada quintal en concepto de transformación del producto.

En ese proceso de transformación el productor debe pagar para que el beneficio realice el proceso de húmedo a seco, lleve a cabo la clasificación del grano, transporte el producto y lo coloque en sacos.

Todos estos procesos en los que debe invertir el sector hacen que la ganancia que se les entregue al final no alcance ni siquiera a cubrir los costos que les genera su trabajo.

De acuerdo con el presidente de la Asociación Cafetalera de El Salvador (Acafesal), Sergio Ticas, lo que le queda al final al productor no puede definirse como ganancia, ya que solamente para producir un quintal debe invertirse entre 75 y 80 dólares.

“Con estos precios nosotros vamos a salir del mercado, ¿Cómo vamos a competir con estos precios?, no es posible, ni siquiera se alcanza a recuperar el dinero”, advirtió Ticas.

El proceso para producir un quintal de café no solo se limita a la siembra de las plantas, sino que también deben gastar en fungicidas, la poda de arboles, mano de obra y demás.

Por ello advierten que si no se toman las medidas necesarias la producción dejará de ser en definitiva un aporte a la economía local.

“Mientras otros países de la región, como Honduras, Guatemala y Costa Rica declaran que van a tener millones de quintales en la cosecha 2015-2016, en El Salvador se habla de que podría llegar a 600 mil quintales, eso no es nada a comparación de los demás”, resintió Ticas.

Sector en decadencia

Para algunos productores de café, el cúmulo de problemas que enfrentan no solo con los bajos precios y  la reducción de las cosechas, sino también con la falta de créditos para invertir, falta de investigación científica, problemas de inseguridad, pleitos internos en las gremiales, entre otros, solamente continúan deprimiendo al sector.

Desde hace más de tres años que el parque cafetalero enfrenta serios problemas con el hongo de la roya, este no se ha logrado combatir y cada época de lluvia sigue poniendo en amenaza las plantaciones y con ello la producción.

Aunque año con año los funcionarios de gobierno señalen que la expectativa de producción de la cosecha de café puede mejorar, la realidad para los cafetaleros es que ya llevan más de tres años en los que el sector no logra recuperar el dinamismo en la economía y la producción continúa en menos de un millón de quintales.

Las condiciones del parque cafetalero ya no son las mismas de antes, el envejecimiento de las plantas provoca que sean menos resistentes a las enfermedades. Aunque el Gobierno ha hablado de renovar una tercera parte del total del bosque, para los cafetaleros, esto solamente es discurso.  

“Con seis millones de plantas que dicen que van a entregar no se logra renovar una tercera parte del parque; para eso deben ser casi 30 millones de arbolitos, si no, no están haciendo nada”, advirtió el representante de Abecafé.

Por si fuera poco, para lograr sostener la producción del grano, el sector debe contar con facilidades de crédito, que a la fecha no tienen.

Según lo han indicado en reiteradas ocasiones, la banca no ha dado las suficientes facilidades para que el rubro  pueda levantarse. Desde que las cosechas comenzaron a disminuir, no han tenido las condiciones para presentar garantías a los bancos para que estos les faciliten los préstamos.

Adicional al problema de la banca, el tema de la delincuencia es otro golpe al bolsillo de los cafetaleros, quienes también se ven agobiados con pagos de renta y extorsiones para poder seguir con su trabajo.

Todo esto hace que el sector vea menos rentabilidad en su labor y que cada día se siga deteriorando el sector.

Beneficios también son afectados

El tema de los bajos precios internacionales no solo es un problema para  los productores del grano, sino que también para los representantes de los beneficios y exportadores de café.

De acuerdo con Ricardo Martínez, representante de Comercial Exportadora S.A de C.V. (Coex), desde que las cosechas comenzaron a disminuir, los beneficios se han visto en la necesidad de reducir significativamente sus costos. “Si la producción es muy baja, los costos se disparan. Por ejemplo, ahorita ya estamos montados en la nueva cosecha, pero si vemos que la cosecha va para abajo, los costos operativos los vamos a ir disminuyendo y lo que va a pasar es que muchos se pueden quedar sin empleo”, señaló Martínez.

Según lo comentó, años atrás la empresa beneficiadora generaba hasta 225 empleos, y hoy mantienen a 80 personas. Para las épocas de buena producción han llegado a maquilar más de 100 mil quintales del aromático, sin embargo, hoy la situación es diferente. El presidente de Abecafé, Marcelino Samayoa, mencionó que la misma baja en la producción tiene una afectación directa para los beneficiadores y exportadores. Según las estimaciones del representante del sector, en el país existen alrededor de 40 beneficios, mismos que antes estaban listos para procesar cerca de 5 millones de quintales, pero en una época como esta, en la que la producción local puede ser de 600 mil quintales como se ha pronosticado para 2016, quiere decir que si fuera equitativo, cada uno tendría para maquilar solamente 15 mil quintales de café.  

Por todos estos inconvenientes que enfrentan directamente los productores de café, así como todos los involucrados indirectamente en el proceso, es que en varias oportunidades han reiterado que necesitan un mayor apoyo al sector, para volver a generar los empleos que tenían antes, así como también ser un aporte en el Producto Interno Bruto del país. Sin embargo, resienten que la mayor parte de promesas se quede en discursos y que temas como el Pacto Nacional del Café solo sean parte de discursos políticos y no de ayudas concretas.