La baja probabilidad de que salga una buena cosecha de frijol, en la siembra postrera, ha llevado a varios comerciantes salvadoreños a adelantarse a comprar cosechas del grano que aún no han salido en países como Honduras, con la esperanza de asegurar el abastecimiento de producto en nuestro país.
Según lo han informado periódicos internacionales, los mayoristas salvadoreños han ofrecido entre $63 y $68 (1,400 y 1,500 lempiras) por quintal, a los productores hondureños para garantizar que les vendan la cosecha.
De acuerdo con el presidente de la Cámara Asociación de Pequeños y Medianos Productores Agropecuarios (Campo), Luis Treminio, lo que puede estar sucediendo en el mercado es que los comerciantes ya estén advertidos de la poca cosecha que va a salir, y por eso ya se encuentren buscando alternativas.
Según lo manifestó el representante de Campo, muchos de los agricultores que tuvieron las condiciones para sembrar en el mes de agosto, probablemente puedan obtener una buena cosecha; sin embargo, los que pudieron hacerlo hasta después del 8 de septiembre tienen pocas probabilidades de obtener un buen producto.
El representante de la Unión Comunal Salvadoreña (UCS), Ramón Mendoza, coincide en que la cosecha postrera puede ser limitada. “Solo si hay suerte en que llueva de manera moderada en octubre, se puede sacar algo”, aseguró.
Para el presidente de la Asociación de Productores Agrícolas de Usulután (Aspau), Daniel Prado, las condiciones climáticas no parecen favorables para los próximos meses, por lo que la cosecha de frijol puede llegar a reducirse entre un 40 y 50 %.
“Si esto pasa, tendríamos que buscar la otra mitad de la producción en otros países”, aseguró Prado.
Se estima que en la cosecha postrera El Salvador produce cerca de 1.8 millones de quintales de frijol y, al menos, 200 mil quintales más se siembran a finales de noviembre y principios de diciembre.
Para los representantes de las gremiales el principal problema de que la producción se encuentre en incertidumbre, se basa en que este año los agricultores no tuvieron la certeza de una fecha especifica para poder sembrar.
Aunque el ministro de Agricultura y Ganadería, Orestes Ortez, señaló a principios de agosto que los productores debían esperar hasta el 15 de ese mes para sembrar, llegada la fecha señalada indicó que agricultores como los de la zona oriental, debían de esperar tener las condiciones de humedad adecuada para poderlo hacer.
Esto llevo a que algunos no se atrevieran a hacerlo por encontrarse en medio del cuarto periodo de sequía (que culminó el 29 de agosto) y otros sembraron tarde.
De acuerdo con los informes del Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales, las lluvias durante el período de invierno se han caracterizado por su irregular distribución temporal y espacial, con cantidades deficitarias respecto al promedio histórico, siendo el trimestre mayo-junio-julio el más seco históricamente registrado.
Entre los meses de junio, julio y agosto, se han registrado 4 periodos de sequía meteorológica, 3 de ellos calificados como “fuerte” (más de 15 días consecutivos sin lluvia) y uno de ellos como sequía débil.
La zona oriental del país ha sido la de mayor afectación por este fenómeno, junto con la parte costera de la zona Paracentral.
Honduras busca prohibir venta de frijol
Ante las condiciones climáticas que mantiene la región centroamericana, el vicepresidente de la Asociación de Agricultores de Honduras, Fredy Torres, consideró que el gobierno del Presidente Juan Orlando Hernández debería emitir un decreto ministerial para prohibir la venta de la cosecha de frijoles a extranjeros, de acuerdo con una publicación del periódico La Tribuna.
Torres, manifestó que están en la mejor disposición de apoyar todas las iniciativas que beneficien al productor hondureño y alabó las iniciativas del titular de la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), Jacobo Paz, quien está a tono con las necesidades de los agricultores.
La Agencia de Estudios Atmosféricos de Estados Unidos informó, mediante un comunicado, que el fenómeno de “El Niño” se prolongará hasta finales de 2015 y eso les preocupa porque el ciclo cuando más se produce frijoles es en la postrera, donde se hace necesario confiar en las fuentes informativas para tomar una decisión si es apto o no sembrar.
“El problema grave es que los salvadoreños se lleven la cosecha y después nos convertimos en importadores para alimentar a la población hondureña y no a ellos, pero el ministro de Desarrollo, Alden Rivera, quien tiene buenas iniciativas, puede hacer acopio de ese decreto ministerial para evitar que el grano salga del país”, recalcó.
Ante esta situación, representantes de las gremiales de productores aseguran que es normal que los países vecinos busquen proteger el alimento de la población.
“Nicaragua también cierra fronteras para que no salga mucho producto del país”, aseguró el presidente de Aspau.
Si Honduras y Nicaragua llegaran a restringir la venta de frijol, El Salvador puede experimentar serios problemas, ya que la única alternativa que se ha encontrado hasta hoy es traer grano de Etiopía.