Honduras le apuesta a la atracción de inversionistas taiwaneses

El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, promueve su país como centro logístico de las Américas, que ofrece grandes oportunidades para los inversionistas.

descripción de la imagen

Por EFE

2015-07-24 11:09:00

TAIPEI. El presidente de Honduras, Juan Orlando Hernández, presidió este viernes un seminario de inversión en Taipei, en el que participaron numerosos magnates isleños, destinado a impulsar las inversiones taiwanesas en Honduras y la venta de productos de este país en la isla.

“Honduras es un país que ofrece grandes oportunidades, dispone de buenas condiciones macroeconómicas, un marco legal favorable y una situación geográfica y desarrollo logístico excepcionales”, dijo Hernández a los empresarios isleños.

El mandatario centroamericano subrayó la gran mejora que se ha registrado en Honduras en los “índices de seguridad y sana convivencia”, tema que preocupa a los inversores taiwaneses, y ofreció un panorama de Honduras como centro logístico de las Américas.

Honduras ha firmado numerosos acuerdos comerciales, incluido uno con Estados Unidos, está embarcada en un proyecto de unión aduanera con Guatemala y el resto de Centroamérica, y desarrolla proyectos logísticos para canalizar el transporte de mercancías entre el Atlántico y el Pacífico, enumeró Hernández.

“Panamá sólo puede absorber un 20 por ciento del tráfico de mercancías entre los dos océanos”, indicó el presidente hondureño, que quiere una participación de su país en ese lucrativo negocio.

El país centroamericano busca, en concreto, atraer inversiones en negocios agrícolas, minería, productos para los mercados de Estados Unidos y Latinoamérica, y vender más café y otros productos a Taiwán, incluidos nuevos rubros como el sorgo.

Con las inversiones y el comercio, el país espera generar empleos y lograr un impacto social y medioambiental positivo, para lo que cuenta con ambiciosos planes logísticos y esquemas como las Zonas de Empleo y Desarrollo Económico, señaló el presidente centroamericano.

Honduras, embarcada en “desarrollar el capital humano, potenciar el aparato productivo, mejorar la seguridad ciudadana y el sistema de justicia, y reforzar las instituciones” espera el apoyo de los sectores privado y oficial de Taiwán, añadió.

Por su parte, el viceministro de Economía de Taiwán, Simon Ko, declaró a Efe que Honduras “es un buen destino para las inversiones taiwanesas y apoyamos decididamente la intensificación de los contactos comerciales y de inversiones”.

El país centroamericano no sólo es un aliado diplomático de Taiwán sino que ha firmado un acuerdo de libre comercio con la isla y también con Centroamérica y Estados Unidos, lo que le permite exportar exentos de impuestos unos 1.600 productos a Centroamérica y Estados Unidos, señaló Ko.

El volumen del comercio bilateral entre Taiwán y Honduras alcanzó los 118,75 millones de dólares en 2014, con exportaciones isleñas por valor de 74 millones de dólares, manifestó el funcionario isleño, citando estadísticas oficiales.

En la actualidad existen 25 inversiones taiwanesas en Honduras, que han desembolsado 1.500 millones de dólares y existen muchas oportunidades aún sin explorar, agregó Ko.

Taiwán busca reforzar sus lazos con Honduras, de cara a un posible reinicio de la disputa diplomática con China, en caso de que el opositor e independentista Partido Demócrata Progresista venza en los comicios presidenciales de enero de 2006.

La participación china en el proyecto hidroeléctrico Patuca III hace de Honduras uno de los posibles objetivos de una campaña china para atraer aliados diplomáticos taiwaneses e intensificar el cerco diplomático a la isla.

La cancelación, en 2009, de una planeada inversión taiwanesa en el proyecto hidroeléctrico Patuca III abrió una época de tensiones entre Tegucigalpa y Taipei, que se intensificó cuando China accedió a financiar el plan en 2013, señalan expertos en Taiwán.

En mayo del 2013, Honduras llamó a Tegucigalpa a su entonces embajador, Mario Alberto Fortín Midence, y no lo reemplazó hasta enero de 2015, dejando su embajada bajo la dirección de un encargado de negocios durante ese largo período.