Kimberly-Clark invierte $34 Mlls. en planta de energía

La inversión abarca la construcción de una planta de cogeneración eléctrica y una caldera de biomasa

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Se tiene estimado que la construcción terminará a finales de este año, con esperanza de iniciar operaciones en 2016.

Por Pedro Carlos Mancía

2015-07-29 6:00:00

Kimberly-Clark anunció la inversión de más de 30 millones de dólares en la instalación de una caldera de biomasa y una planta de cogeneración eléctrica, las cuales comenzarán a operar a finales de este año.

Con esta caldera, la empresa generará vapor y empleos indirectos por el cultivo de biomasa local; mientras que la planta de cogeneración producirá vapor y energía a base de gas licuado (GLP). Con esto se estará diversificando la matriz energética y se reducirá la demanda de la empresa hacia la red nacional.

El objetivo de este proyecto es disminuir en 16 mil toneladas métricas la producción de CO2 (gases de efecto invernadero).

“Con estos proyectos, la planta Sitio del Niño tendrá una plataforma operativa competitiva a mediano y largo plazo; y el país, una compañía con una producción local continua, que en la actualidad representa más de 10 millones de dólares anuales en exportaciones”, expresó Rafael Ravettino, gerente de país de Kimberly-Clark.

Agregó que “también debe verse como el compromiso de Kimberly-Clark de tener operaciones sostenibles y comprometidos con el medio ambiente”. Este proyecto se suma a la inversión de 10 millones de dólares a principio del año con la maquinaria Yankuik, que le ha permitido a la empresa mejorar sus procesos productivos y cubrir la creciente demanda de sus productos.

El total de inversión es de 34.7 millones de dólares, invirtiendo 12.5 millones de dólares para la caldera de biomasa y 22.2 millones de dólares en la planta de cogeneración, detalló Rodrigo Cruz, gerente de operaciones de la empresa.

A este momento, la construcción de la obra lleva 30% de avance con una generación de empleo de 170 personas entre ambos proyectos, reiteró.
Por otra parte, indicó que la caldera de biomasa producirá 15 toneladas hora de vapor para el consumo de producción de la fábrica, mientras que la planta será un complemento de vapor. “Esto nos permite ser más competitivos con otros países que exporta a El Salvador y a la región que tienen costos energéticos más bajos”, añadió Cruz.

De esta forma, la compañía podrá abastecer casi el 100% de su consumo eléctrico; actualmente, Kimberly-Clark hace uso de la red nacional eléctrica para el uso de energía en su producción, pero una vez inicie a operar este proyecto estará utilizando menos del 5% de la red (0.25 megavatios al mes). Más allá de la competitividad, esto permitirá que la empresa sea sostenible en su plataforma operativa, así como también un ahorro de aproximadamente el 30% en su consumo energético.

La planta de cogeneración sería la primera en la región latinoamericana por parte de Kimberly-Clark, reafirmando su posición como la planta más grande de la empresa en todo el istmo; y sería el segundo país en tener una caldera de biomasa, siendo Brasil el primero.

En los últimos años, la empresa ha invertido en el país de forma constante en tecnología para asegurar controles operacionales que minimicen los impactos ambientales.

Continuo crecimiento
Kimberly-Clark en El Salvador posee la planta más grande de Latinoamérica, con una plantilla de más de 1,500 colaboradores, que producen la línea de la marca Scott (que incluye papel higiénico, servilletas y toallas de papel), los pañuelos desechables Kleenex y bobinas de papel, que son consumidas tanto en el mercados salvadoreño como en el resto de Centroamérica, Caribe y Chile.

De la producción de la empresa entre el 14% y 16% se consume localmente, mientras que el resto se exporta a la región, esto convierte a Kimberly-Clark en el sexto más grande exportador del país. Rafael Ravettino explicó que para este año esperan un crecimiento del 3% en sus exportaciones.