País sin política logística: puertos, aeropuertos y aduanas sin coordinación

Los esfuerzos por mejorar son aislados y no tienen suficiente inversión

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El país tiene un gran potencial para desarrollar los servicios logísticos, pero estos no se aprovechan. FOTO EDH /ARCHIVO

Por Karen Molina nacional@eldiariodehoy.com

2015-06-04 9:00:00

El Gobierno afirma que quiere convertir al país en un centro logístico regional con los costos de movilidad más bajos del Istmo en los próximos 20 años, pero aún no cuenta con una política de logística definida que integre el trabajo de puertos, aeropuertos, aduanas y carreteras para un mismo fin.

Aunque El Salvador tiene la ubicación geográfica idónea para recibir mercadería y enviarla al resto de América Latina y el mundo, no hay una estrategia definida de las acciones a seguir para conseguirlo.

Pedro Argumedo, analista del área macroeconómica de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades), dice que aunque hay esfuerzos por mejorar cada sector, estos siguen siendo aislados y no hay una visión integral de lo que se quiere hacer. “No tenemos una estrategia integrada de logística. Si de verdad quieren convertirse en un centro logístico, no se está haciendo nada para lograrlo”, dijo Argumedo.

“Hemos invertido muy poco si quisiéramos ser un centro logístico”, afirmó.

La subutilización de las obras de infraestructura, la poca inversión y la burocracia que predomina en ellas vuelve al país poco atractivo para que las empresas usen el país como centro logístico.

De acuerdo con el último dato del Índice de facilitación de comercio en Centroamérica elaborado por el Foro Económico Mundial, El Salvador pasó de la posición 55 a la 71, es decir, que ha desmejorado su comercio regional.

Los demás países de la región, por el contrario, han mejorado sus índices con los años. Los casos más significativos son Guatemala y Nicaragua.

A juicio de Argumedo si el país no define desde ahora el rumbo y el destino al que quiere llegar, “los demás países de la región se lo comerán en el corto plazo”.

El Puerto de La Unión sigue sin concesionarse tras más de seis años de terminada su construcción. El Puerto de Acajutla, en Sonsonate, no es suficiente para descargar mercadería y sus procesos se vuelven engorrosos cada vez que el equipo de inspección no intrusiva (rayos X) emite una luz roja de revisión total.

En el Aeropuerto Internacional, el área de carga es al que menos se le ha invertido en los últimos años. La inversión privada de la empresa de servicios de aeronáutica Aeroman es la única que ha invertido $55 millones.

La carretera Longitudinal del Norte, que construyó Fomilenio hace algunos años para mejorar la productividad de la zona norte del país, se está desaprovechando, y otras obras como el baipás de San Miguel se hacen al margen de otros proyectos con gran potencial como el Megatec de La Unión.

Tampoco hay una visión clara para mejorar los estudios académicos para los jóvenes a través de carreras técnicas. “Los Megatec están subutilizados”, dijo Argumedo.

Salvador Mónico, director presidente de la Cámara Logística de El Salvador, que aglutina a otras gremiales de agentes de carga, operadores logísticos y almacenadoras, dice que el país necesita una política que marque el rumbo de la economía y que ésta se trabaje en común acuerdo con la empresa privada, que es la que pone el dinero para las inversiones en los proyectos de desarrollo e infraestructura. “Deben trabajar más de la mano con el sector privado. No es un problema que puedan resolver solo ellos como gobierno. Tienen en sus manos el poder para darnos la participación y así puedan hacer el cambio”, manifestó.

Omar Ramírez, presidente de la Asociación de Representantes de Empresas Navieras y Portuarias (Arenep), dijo sobre el puerto de Acajutla que si bien es cierto la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) está haciendo esfuerzos para mejorar los procedimientos y agilizar el comercio, estos siguen siendo insuficientes si se toma en cuenta la coordinación con otras instituciones.

“El Gobierno tiene que trabajar más de la mano con la empresa privada porque solos no van a resolver todos los problemas que hay en todos los sectores”, manifestó.

El Ministerio de Obras Públicas trabaja desde 2013 en una política de logística, que pretende integrar los corredores viales con los principales puertos y aeropuertos del país y los puntos fronterizos con la región. Sin embargo, la institución confirmó ayer que el anteproyecto sigue en revisión en la oficina del ministro Gerson Martínez.

A juicio de Argumedo, si el Gobierno realmente quiere apostar por potenciar la logística nacional, debe salir a buscar inversión en esta vía y dirigir todos sus recursos en este rubro económico. “Tenemos un gran potencial, pero no se aprovecha”, dijo el analista de Fusades.