Carlos Calleja, presidente de Fundación Calleja y vicepresidente de Grupo Calleja profundizó en la importancia de invertir y priorizar en el tema educativo del sector público del país. Calleja brindó declaraciones a El Diario de Hoy después del lanzamiento del programa Todos son Nuestros Niños en el contexto de inseguridad que vive el país.
¿Qué rol está jugando Grupo Calleja ante la coyuntura de violencia que vive nuestro país?
La situación que está enfrentando el país es una situación preocupante, con muchos desafíos y retos, estamos en tiempos retadores, pero eso no significa que tenemos que perder las esperanzas, es cuando más debemos de rebuscarnos como sabemos hacer los salvadoreños para unirnos en estos espacios para trabajar de la mano y salir adelante.
El tema de las oportunidades es clave, y la razón por la que estamos acá en esta escuela es porque estamos apostando por nuestro tesoro más grande que son nuestros niños, nuestros jóvenes, y yo tengo la esperanza que sí invertimos en ellos y en su desarrollo este país estará más preparado para enfrentar y superar los problemas.
Nuestros niños son la clave ante los desafíos y retos que enfrentando como país, nosotros nos estamos ubicando en este tema de educación porque creemos que es clave e importante.
Yo recomendé decir no a los jóvenes ya que mi padre me dio ese consejo a mí, saber decir no es difícil, pero si logras adoptar esa buena práctica uno se puede quitar muchos riesgos del camino, nuestros jóvenes ahora están enfrentando muchos riesgos diarios en sus comunidades, es importante poder aprender a decir no y buscar otros caminos, pero tienen que ver que ese otro camino existe.
Nuestros principales enemigos son la pobreza y la falta de oportunidades, y nuestros niños tienen que pensar y ver que si hay oportunidades para no caer en otras opciones como la violencia.
¿Es posible tender puentes entre las empresas y el sector público?
Todos son Nuestros Niños es un ejemplo donde varias empresas se han unido como parte del sector privado en una escuela pública en conjunto con el Ministerio de Educación, el tema no es si se puede o si no se puede tender puentes, se tiene que, no hay otra opción, y se necesita voluntad de todos, se tiene que hacer el esfuerzo, y tenemos que lograr quitar nuestras diferencias en estos espacios, y la educación es uno de esos espacios para unirnos.
¿Qué consejos le da a la niñez salvadoreña?
Nunca hay que dejar de soñar, vale la pena soñar en grande , uno no tiene que ser el más inteligente, lo único que tienen que tener es una causa, algo que les apasione y luchen por eso. El camino de la vida no es fácil, si quieren cambiar el mundo tienen que seguir trabajando, y eso no es fácil , las cosas no se cambian de la noche a la mañana.
También hay que saber decir no en la vida, no todo lo que nos ofrecen nos conviene, hay que saber decir no, cuando te ofrecen algo que no te conviene o te llaman para algo que no te conviene, digan no, piensen en ustedes primero.
Uno en el camino de la vida nunca tiene que dejar de aprender, si tienen esa mística de trabajo, no la pierdan y conserven su humildad.
Estamos enfrentando tiempos difíciles, y las decisiones que tomemos hoy definirán el futuro, si seguimos igual o si empezamos a salir adelante, y esas decisiones están en sus manos en este momento, les ruego que sigan estudiando y trabajando, su futuro está en los libros y en esta escuela, no en las calles, recuerden eso.
¿Qué oportunidades hay en invertir en educación?
Creo que cada empresa debe trabajar desde su trinchera, y ya hay muchos que ya están trabajando en temas sociales, el tema acá es sumar, de articular fuerzas alrededor de las grandes iniciativas como la educación, quizás mi invitación sería a los que ya están trabajando que sigan y los que aun no lo hacen que se animen a dar el paso.
Al final, el país necesita que los empresarios incorporemos lo social en el día a día, siempre tiene que estar presente. Y nuestra visión como grupo empresarial es generar valor compartido en todo lo que hacemos, generar valor para nuestras comunidades, no solo retornos y utilidades para los accionistas, sino para todo el país.