Consulta y diálogo, herramientas de RSE

Jay Hartling experta canadiense participó del taller

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Jay Hartling posó junto a organizadores del taller y empresas ponentes. Foto EDH/ Marlon Manzano

Por Marlon Manzano negocios@eldiariodehoy.com

2015-03-08 8:00:00

El diálogo y la consulta como herramientas de desarrollo y de Responsabilidad Social Empresarial (RSE) fue el principal enfoque que Jay Hartling transmitió a los asistentes en su charla magistral del taller organizado por Fundemas y la Embajada de Canadá.

En el taller se dieron a conocer dos casos prácticos de cómo se puede utilizar el diálogo y las consultas como estrategias de RSE adentro de las empresas.

Hartling, originaria de Canadá, es experta en procesos de diálogo y consultas de empresas que desean desarrollar proyectos de alto impacto en una comunidad, y que por ende, de alguna forma están regulados por el gobierno.

La experta canadiense se enfocó en el rol que debe jugar el diálogo y la consulta hacia afuera de la empresa.

La interacción de esta con el entorno, la consulta entre los involucrados de cualquier proyecto de inversión social o inversión empresarial, que incida en una comunidad tendrá diferentes grupos de interés que atender y escuchar.

Por lo tanto, la empresa debe procurar que cada uno de estos actores comprenda la finalidad del proyecto y participen de la elaboración de este, y es ahí, según Hartling, donde la consulta entre todos los actores, genera un diálogo que brindará sostenibilidad a largo plazo.

“Las empresas no invierten para un día, o para llegar solo un rato a una comunidad o ciudad, las inversiones implican una permanencia de largo plazo en las comunidades, de ahí surge la importancia de buscar herramientas que hagan que el proyecto en la zona sea sostenible”, explicó Hartling.

Para la experta, es posible desarrollar una estrategia de RSE sin diálogo, pero nunca tendría la aceptación de la comunidad y sería difícil medir resultados de largo plazo.

“El diálogo contribuye a construir relaciones más fuertes y de entendimiento mutuo. Hay muchas metodologías para este tipo de diálogo, el “cara a cara” es el más básico y efectivo, este se puede llevar a cabo por medio de foros y consejos comunitarios, mesas redondas, talleres, casa abierta y otros”, agregó.

El diálogo busca establecer una relación armoniosa y cobeneficiaria entre la comunidad y la empresa.

De acuerdo con Hartling es importante primero, “conocer su público”, el diálogo debe ser un espacio compartido, donde ambas partes se sientan dueñas del mismo.

Además, debe ser estructurado y seguro para que ambas partes (empresa y público de interés), puedan aprender y entender el punto de vista del otro con el propósito de resolver un asunto (positivo o negativo).

Los principios del diálogo incluyen: la transparencia, respeto, inclusividad, y compromiso de largo plazo para construir una relación duradera.

Canadá es un país con una amplia experiencia en manejo de consultas comunitarias, esto se debe a que una de sus principales industrias de producción es la minería e hidrocarburos, esto implicó en los orígenes de esa industria, una permanente búsqueda de acuerdos, por medio de un diálogo franco e inclusivo.

Casos de diálogo y consulta en RSE

Otro de los objetivos del taller fue mostrar dos casos de empresas de origen canadiense que han logrado un alto impacto y beneficios con estas herramientas dentro de sus compañías, y por ende, para el crecimiento económico del país, estas empresas que operan localmente fueron Scotiabank El Salvador y Telus Internacional.

Ambas compañías coincidieron en la importancia de generar espacios de diálogo y comunicación entre todas las jerarquías de la organización para promover una cultura de transparencia e innovación, que a la larga se transformará en mayor productividad e identidad de los colaboradores.

Para Hartling, este tipo de estrategias tiene una alto impacto comercial, “Resultan en una ventaja competitiva y mayor ganancias o ingresos, así como en la imagen pública de la empresa”, aseguró.