Dos nuevas empresas entran al mercado televisivo mexicano

El Grupo Radio Centro y Cadena Tres, perteneciente al Grupo Imagen, ganaron la licitación para las dos nuevas cadenas de televisión abierta que se abrirán en México el próximo año.

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Las nuevas cadenas formarán parte del mercado televisivo de México, que hasta ahora se lo reparten entre dos grandes empresas: Televisa, de la familia Azcárraga y que tiene el 70% de la audiencia en sus varios canales, y TV Azteca, del Grupo Salinas y que obtiene el 30% restante.

Por EFE

2015-03-13 11:00:00

MÉXICO. La llegada de dos nuevas cadenas a la televisión abierta en México ampliará un espectro televisivo dominado por el conglomerado de Televisa y plantea la opción de que los contenidos cambien, en un país con una televisión abierta poco arriesgada.

Hasta ahora, el pastel de la televisión abierta en México se lo reparten entre dos grandes empresas: Televisa, de la familia Azcárraga y que tiene el 70 % de la audiencia en sus varios canales, y TV Azteca, del Grupo Salinas y que obtiene el 30 % restante.

El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) informó el miércoles que el Grupo Radio Centro y Cadena Tres, perteneciente al Grupo Imagen, ganaron la licitación para las dos nuevas cadenas de televisión abierta que se abrirán en México presumiblemente el próximo año.

Radio Centro hizo una oferta por 3.058 millones de pesos (197.7 millones de dólares) y 106 millones de habitantes servidos, mientras que Cadena Tres hizo su oferta por 1.808 millones de pesos (116,9 millones de dólares), con igual número de habitantes cubiertos.

Se cerró así una batalla que solo tuvo a estas dos competidoras, después de la retirada en febrero pasado el Centro de Información Nacional de Estudios Tepeyac, del fallecido empresario y dirigente deportivo Mario Vázquez Raña.

En opinión del experto en telecomunicaciones, Julio Juárez, pese a que la televisión pública es “muy apetecible comercial y, por supuesto, políticamente”, el hecho de que solo se hayan presentado estos dos grandes grupos ha sido principalmente económico, por la gran inversión necesaria.

“Estamos hablando de grupos mediáticos que dominan o tienen una presencia en sectores radiofónicos e impresos ya importantes y que buscan llevar esta presencia a un nuevo espacio atractivo”, apuntó en una entrevista telefónica.

Pese a la transparencia de la concesión otorgada por un organismo independiente, dijo, “atrás siempre va a haber un rumor y un trasfondo político en cuanto a quiénes son los grupos que están siendo beneficiados con esta licitación”.

“Los medios tienen un poder importante y este nuevo mercado mediático lo que busca es repartir un poder que hasta ahora ha estado concentrado en una empresa, que es Televisa, y en ciertos momentos en TV Azteca. y que sí se verá trastocado con la llegada de estos dos grupos”, apuntó.

Las dos nuevas cadenas de televisión constituyen una de las iniciativas de la reforma a las telecomunicaciones que impulsó el Gobierno del presidente Enrique Peña Nieto (2012-2018), que busca aumentar la competencia en el sector con mayores inversiones y permitir la entrada de tecnología avanzada.

En una entrevista radiofónica, el director general de Grupo Imagen, que posee a Cadena Tres, Olegario Vázquez Aldir, afirmó este jueves que esperan comenzar transmisiones en enero del 2016 y en un año difundir su señal al 65 % de la población.

Según explicó, la empresa pretende “construir una televisión diferente, una televisión vanguardista” con “contenidos innovadores” y “atrevida”.

Y es que esta es una de las grandes incógnitas de las nuevas cadenas de televisión, si seguirán la vieja fórmula exitosa o apostarán por conseguir nuevos públicos.

“Depende de cuál será la estrategia comercial de estos medios, si van a apostar por hacer lo que hizo Azteca en los noventa, que es apostar por un modelo exitoso haciendo los mismos contenidos, limitando los costos y ampliando las ganancias, o serán medios que intentaran romper este modelo y apostar por crear y cultivar a nuevos públicos”, dijo Juárez.

En su opinión, es “muy probable” que apuesten por lo que ya se ofrece pero también “hay indicios de que la gente está virando hacia la televisión de paga y restringida, y esos públicos se han vuelto más sofisticados en cuanto a su consumo en medios”.

Los títulos de concesión de espectro radioeléctrico para uso comercial de estas dos nuevas cadenas nacionales tendrán una vigencia de 20 años