Lanzan “Alianza Cacao” con apoyo de USAID y CRS

El Centa, la ENA y dos estaciones experimentales serán las que estarán a cargo de los jardines clonales de la planta de alta calidad, con apoyo técnico del CATIE y México

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Desde la izquierda, Jhon Feeley de Asocio para el Crecimiento, Mari Carmen Aponte, Embajadora de EE. UU., Roberto Lorenzana Secretario Técnico y Orestes Ortez, ministro de Agricultura y Raúl López Embajador de México. EDH / Mauricio Cáceres

Por Evelyn Machuca negocios@eldiariodehoy.com

2014-12-04 8:00:00

Con una inversión de $25 millones fue lanzado ayer el proyecto Alianza Cacao El Salvador, en el marco del tercer aniversario de Asocio para el Crecimiento, un programa de cooperación bilateral entre Estados Unidos y El Salvador.

La Alianza contempla el cultivo del grano en 10 mil hectáreas en 83 municipios del territorio nacional, con lo que las autoridades esperan generar unos 26,570 empleos directos e indirectos y beneficiar a cerca de 10 mil familias de productores de cacao.

Los fondos, que serán invertidos entre 2014 y 2019, provienen de un acuerdo tripartito que fue anunciado en abril pasado en México, donde los dos países norteamericanos en mención acordaron apoyar a El Salvador en el incremento de su producción de cacao como una alternativa económica para los productores afectados por la roya en sus cultivos de café. El cacao se erige también como opción para agricultores que buscan cultivos más rentables a futuro.

La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) firmó con Catholic Relief Services (CRS) un convenio de cooperación de donde serán desembolsados $10 millones; la Fundación Howard Buffett aportará otros $10 millones y los $5 millones restantes serán proporcionados por empresarios privados nacionales.

Las autoridades, sin embargo, no descartan que estos fondos puedan sumar con el tiempo aproximadamente $40 millones, según surjan nuevos cooperantes. El aporte del Gobierno mexicano será en instrucción técnica.

Según detalló el ministro de Agricultura y Ganadería, Orestes Ortez, un aspecto importante es que las plantas que entregarán serán cultivadas únicamente en el Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (Centa), en la Escuela Nacional de Agricultura (ENA) y en dos estaciones experimentales, situadas una en Santa Cruz Porrillo (Tecoluca, San Vicente) y la otra aún no definida en el oriente del país.

Allí serán manejados los jardines clonales, los germoplasmas (diversidad genética de las especies vegetales o conjunto de genes que se transmite mediante células reproductoras) y las semillas, con el objetivo de “lograr recuperar la calidad de lo que fue en su momento el cacao criollo salvadoreño”, expresó.

Para la construcción de esos jardines clonales, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) contará con la colaboración del Centro Agronómico Tropical de Investigación y Enseñanza (CATIE).

El funcionario agregó que otro aspecto importante es la extensión agrícola o acompañamiento a los productores para garantizar que den un manejo adecuado no solo a la siembra, sino también al control integrado de plagas para que puedan obtener una buena producción.

En la actualidad hay menos de 3 mil manzanas de cacao sembradas en todo el país. Aunque el ministro prefirió no aventurarse con las cifras de producción nacional de cacao en estos días, sí valoró que el precio de cada quintal “anda rondando los $100. Este es un commodity (mercancía) que después del petróleo y del oro es uno de los de mayor valor y no de hoy, sino de años”.

“De aquí vendrán no solo las posibilidades de exportar el grano -almendra-, sino las posibilidades de que avancemos en la agroindustria; hay que recordar que nosotros estamos desarrollando el parque agroindustrial en el Centa junto con el Viceministerio de Ciencia y Tecnología; entonces, es una gran oportunidad”, destacó.

Sabor y rescate cultural

El jefe de la Delegación del Asocio para el Crecimiento, John Feeley, y la directora de país de CRS, Erica Dahl-Bredine, valoraron la historia del cacao en El Salvador, que llegó a ser en su momento la moneda nacional.

“Estamos sembrando un árbol de esperanza y no puede haber un mejor lugar que este para sembrar el primer árbol de Alianza Cacao El Salvador, porque este lugar simboliza lo que el cacao simboliza en la historia de la cultura de El Salvador. Lo que ustedes están haciendo hoy es reconectarse con sus ancestros, con los mayas”, manifestó Feeley, bajo un canopi improvisado en el medio de las ruinas arqueológicas de San Andrés (Zapotitán, La Libertad).

Dahl-Bredine se mostró conmovido por las palabras que minutos antes había expresado una agricultora, quien culminó su intervención diciendo: “Esperamos que lo nuestro no muera”.

La funcionaria apuntó que esta “es una alianza ambiciosa” que “además busca el rescate de la identidad cultural de los salvadoreños”.

Con Alianza Cacao El Salvador las autoridades buscan diversificar las exportaciones del cacao fino de aroma y de alto valor, que es cultivado en pocos países. “Trabajando juntos podremos restaurar este cultivo a su nivel de excelencia para que el chocolate salvadoreño sea degustado en todos los rincones del mundo”, acotó Feeley.