El representante legal de la Asociación de Empresas de Seguros de El Salvador (ASES), Raúl Betancourt, señala que con la reciente reforma fiscal el rubro de seguros resultará impactado, por la cantidad de transacciones financieras que deben hacer relacionadas con los activos que manejan y las indemnizaciones que pagan, con lo que resultarán afectados sus clientes, más que todo.
Como rubro interpusieron observaciones ante el Ministerio de Hacienda, que tenían que ver con las indemnizaciones del pago de seguro por siniestros, ya que no se contemplaron dentro de las exenciones del impuesto por transacciones electrónicas.
“Van a afectar directamente al consumidor, no se trata de trasladar o no un costo. Se trata de que es una transacción gravada y cuando la gente vaya con su cheque que supere los $1000, tendrá que soportar el pago de un impuesto”, señala el representante de ASES.
Menciona que la mayoría de indemnizaciones que superan los $1,000 van para seguros muy sensibles como los de salud y vida.
Agrega que este tipo de medidas fiscales no incentiva la inversión en general y perjudica el desempeño, los resultados y oportunidades que pudieran generarse de las industrias que ya están trabajando. Descartó que las primas de los seguros presenten un incremento en el costo, pero que el indemnizado no recibirá los mismos montos de indemnización.
La situación viene a sumarse al impuesto al reaseguro que el rubro ya enfrentaba desde hace dos años.