La reforma energética en México permitirá que el sector privado se involucre en el rubro energético del país; esto podría traer grandes beneficios para los países centroamericanos que mantienen relaciones comerciales con México debido a que los precios de la energía se abaratarán, ha explicado Raúl López Lira, embajador de México en El Salvador.
El propósito de la reforma es “atraer mayor inversión y modernizar el sector energético”, abriendo las posibilidades a que empresas nacionales y extranjeras puedan incursionar en el sector de energía.
En México se tiene pensado que la reforma creará un aumento en la producción de energía más limpia y de menor costo, así como también un incremento de la renta petrolera, la generación de empleos y protección del medio ambiente.
Esto sería un beneficio para los países centroamericanos que mantienen negocios con el país latinoamericano, debido a que el precio del gas y petróleo será más barato, permitiendo que empresas puedan comprar estos productos a menores precios, a juzgar por las declaraciones del diplomático acreditado en el país.
Beneficios del Siepac
La reforma permitiría que la conexión del Sistema de Interconexión Eléctrica de los Países de América Central (Siepac) del Proyecto Mesoamérica pueda ser una opción para vender energía en Centroamérica.
De acuerdo a López Lira, en el caso de El Salvador, la energía mexicana es más barata que la que se compra en Guatemala, opción que podría permitir bajar los altos costos.
El único problema que Gobierno mexicano ha encontrado con la exportación de energía a El Salvador es que Guatemala es un “paso obligatorio”. Para llevar la energía al país, México tendría que importar su energía a Guatemala para que ellos la exporten, incrementando costos del proceso.
Es por esto que se están realizando negociaciones con el gobierno guatemalteco para eventualmente crear relaciones comerciales con la nación.
El embajador considera que la reforma tendrá un gran impacto para el desarrollo de México. Principalmente, la ley brindará “apoyo a la economía familiar” a través de la disminución de precios de energía como luz y gas, debido a esto se espera ver un efecto colateral en los costos de producción de alimentos, los cuales tendrán precios más bajos. Esto también permitirá que empresas pequeñas y medianas abaraten sus costos en energía, logrando mayor competitividad para el país.
Y será una herramienta para la creación de más empleos formales. López Lira expresó que en la primera fase de la reforma hasta 2018, se estima una generación de medio millón de empleos. El Gobierno espera que hacia 2025 se puedan crear hasta 2.5 millones de empleos nuevos y bien remunerados.
Con este proyecto pretenden aumentar la transparencia en el sector energético. Esto se logrará al brindar detalles a la población sobre los ingresos que se obtienen por la extracción de petróleo y gas natural.
Honduras lo analiza
En el país vecino Honduras, trascendió que la reforma energética mexicana podría facilitar la compra de excedentes a este país y paliar su crisis eléctrica que ha llevado a racionamiento, dijo el embajador en Tegucigalpa.
Según el embajador Víctor Hugo Morales, “Queremos fortalecer e incrementar nuestra producción y en la medida que tengamos excedentes esto será una buena noticia para nuestros vecinos, como Honduras”.