Pensiones subirían 25 % al elevar 1 % rentabilidad

La baja rentabilidad les ha quitado a los trabajadores más de $1,000 millones en intereses

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René Novellino, presidente de Asafondos, expuso la situación actual de las pensiones a representantes de empresas agremiadas a la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI).

Por Karen Molina negocios@eldiariodehoy.com

2014-07-10 8:00:00

Si la rentabilidad de los fondos de pensiones subiera tan solo un punto porcentual adicional al que el Gobierno paga, los trabajadores que cotizan a las AFP podrían ver incrementada en el 25 % su pensión en el futuro, reveló ayer René Novellino, presidente de la Asociación Salvadoreña de Administradoras de Fondos de Pensiones (Asafondos).

Eso significa que si, por ejemplo, la pensión de una persona fuera de $200, si su rentabilidad hubiera crecido 1 %, el nuevo monto sería de $250, dijo Novellino, quien expuso el tema a representantes de empresas agremiadas a la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI).

El dato es sumamente útil para más de 1.6 millones de trabajadores que actualmente están afiliados al sistema de pensiones privado (Administradoras de Fondos de Pensiones, AFP), cuya cuota de vejez depende exclusivamente de los aportes que hayan hecho a lo largo de su vida y de las ganancias que hayan obtenido al invertirlos.

Pero, por ahora, la realidad es otra. Debido a que el Gobierno obliga a las AFP a invertir el 53 % de sus fondos en la compra de Certificados de Inversión Previsional y otros instrumentos financieros que e mite el Estado, éste solo paga una rentabilidad o interés un poco superior al 1 %, mientras que a otros inversionistas les paga tasas de entre el 7 % y 8 %.

Por esta diferencia, los ahorros de los trabajadores han dejado de percibir no menos de $1,000 millones, que podrían haber aumentado su cuota de pensión significativamente en el futuro.

Según Novellino, si ahora el fondo total de ahorros de pensiones es de $7,400 millones, éste podría haberse incrementado a $8,400 si tan solo el Gobierno pagara una tasa de rentabilidad mayor.

Sin embargo, hoy por hoy esta tasa está amarrada a una reforma de ley que se hizo en 2006 y que no se ha reformado en los últimos años.

Esta reforma indica que el Gobierno debe pagar la tasa LIBOR (una tasa de interés de referencia), que cayó a menos del 1 % en los últimos años, más 0.75.

De acuerdo con organizaciones de trabajadores, esta reforma es inconstitucional porque el Gobierno debería pagar tasas de mercado, como la que paga a otros inversionistas.

Novellino dijo que este tema debe ser de preocupación para los trabajadores pues, dependiendo de la rentabilidad que obtengan de sus cotizaciones, así será su cuota mensual a la hora de jubilarse.

“Es fundamental que los dueños del dinero tengan conciencia sobre su futuro”, dijo el experto.

Desde la parte institucional, Asafondos ha insistido al Gobierno que abra las posibilidades de inversión de estos fondos a través de un mayor desarrollo del mercado de valores.

Lo que se busca es disminuir ese 53 % de dinero que se le presta por ley al Gobierno a bajo interés y que los fondos se inviertan en otros instrumentos, como por ejemplo, para financiar proyectos de infraestructura, con los que se generarían más empleos y más desarrollo para el país.

Cotización

En relación al empleo, Asafondos expuso ayer que entre las propuestas que se han estudiado para mejorar el sistema de pensiones está solicitar una flexibilización de los años de cotización que necesitan los trabajadores para poder jubilarse.

Según el artículo 147 de la Ley del Sistema de Ahorro para Pensiones, una persona necesita haber cotizado 25 años en una AFP, un plazo que muy pocos ciudadanos llegan a cumplir, debido al nivel desempleo e informalidad en el país.

De acuerdo con Novellino, el promedio de los años que cotiza más de la mitad de los afiliados solo ronda los 11 años, por lo que bien podrían hacerse ajustes que permitieran a estas personas jubilarse con menos años.

La preocupación viene, sobre todo, por la cobertura de salud de los beneficiarios, pues si estos no han completado los 25 años, la AFP le devuelve el dinero que ahorró, pero no se le inscribe al Seguro Social, un servicio importante a una edad avanzada.

Pero si se modificara o flexibilizaran estos años, aún cuando el trabajador no hubiera completado los 25 años, podría entregársele una pensión pequeña y contar, a la vez, con el beneficio de salud.

El reto para el Gobierno es aumentar el número de empleos y que estos sean formales, para que los ciudadanos puedan cotizar desde muy jóvenes y, así, su dinero acumulado sea mayor a la hora de jubilarse.

Las estadísticas previsionales señalan que de los 2.4 millones de trabajadores afiliados a una AFP, solo 656,666 cotizan de una forma regular. El resto cotiza unos meses y otros no.

Novellino también aseguró que podrían hacerse mejoras para fomentar el ahorro voluntario, con el que los ciudadanos podrían incrementar su pensión en un futuro.

Desde que el sistema de pensiones pasó a ser privado en 1998, las cotizaciones han generado un total de $2,200 millones en rentabilidad, pero en los últimos meses la rentabilidad nominal ha caído significativamente. Según los datos de la Superintendencia del Sistema Financiero, la rentabilidad promedio nominal a marzo de este año fue de 0.70 %, la más baja desde 2013. En años anteriores, la rentabilidad alcanzó hasta el 6 %, lo que le dejaba ganancias significativas a los empleados y les aseguraba mejor pensión a la hora de jubilarse.