Escasez y altos precios del frijol agobian a la región

La producción de varios países demuestra que no alcanzan a cubrir la demanda propia

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En algunos países centroamericanos, ya se ha tomado la decisión de importar producto de terceros países. Foto EDH / Archivo

Por Patricia García /Agencias nacional@eldiariodehoy.com

2014-07-11 8:00:00

La escasez del principal producto de consumo de la canasta básica y el exagerado incremento de precio de este ha afectado no solo a los salvadoreños, sino que también a todos los países de la región.

Desde inicios de año se anticipó en algunos países centroamericanos que la cosecha no llegaría a los pronósticos y expectativas esperados, lo cual afectaría a toda la región.

En el caso de Nicaragua, según lo refieren medios internacionales, es donde más ha golpeado la reducción del grano y esto a su vez ha producido un efecto de descontrol en los demás países.

Para el ciclo productivo de la cosecha 2013-2014 en Nicaragua, se esperaba obtener 5.2 millones de quintales, pero lejos de eso, apenas se lograron 3.5 millones de quintales, es decir, 1.7 millones quintales menos.

Esta cantidad, aunque permite cubrir la demanda de los nicaragüenses (que tienen una dieta anual de 2.7 millones de quintales), no alcanza para cubrir la demanda extranjera que tiene.

En Honduras, según los datos proporcionados por periódicos internacionales, la producción promedio es de 2.3 millones de quintales, de los cuales sus habitantes consumen alrededor de 2 millones de quintales anuales, por lo que el excedente suele rondar los 300 mil quintales.

Sin embargo, las lluvias que se produjeron en febrero generaron la aparición de hongos, dañando la producción de frijol. Una organización de productores de granos en Honduras dice que hubo una reducción de 35 % en la cosecha.

El Salvador, aunque las autoridades de agricultura han reiterado en varias ocasiones que la producción superó los 2.6 millones de quintales del grano, frente a un consumo que apenas llega a 2.4 millones de quintales, los agricultores han señalado que no se logró llegar a esa cantidad y que por ello se está en las condiciones de escasez y altos precios.

La reducción considerable en la producción en algunos países, como lo ha señalado anteriormente la analista del sector agropecuario de la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (Fusades), Amy Ángel, es necesario que se comprenda bajo la relación que existe entre todos los países, ya que como lo apunta la analista de Fusades, Nicaragua provee más de un millón para la exportación de frijol al resto de la región y así sucesivamente existe un intercambio comercial entre los cinco países.

Tal es el caso de Costa Rica, donde la producción nacional apenas cubre el 29 % de su consumo y el 71 % restante, debe ser importado de los países de la región o terceros.

En Guatemala se produce el 80 % del consumo y el 20 % debe comprarse fuera. Ante esta crítica situación, donde no existe un país centroamericano que se encuentre en las condiciones para proveer el producto a los demás, los gobiernos del Istmo se han visto en la emergencia de traer el producto de terceros países, aún bajo riesgos de plagas y de que el grano importado no sea del gusto de la población.