En un ambiente marcado por notas orientales, la semana pasado abrió sus puertas al público el restaurante Maki Sushi, en la Zona Rosa de San Salvador. El restaurante pretende convertirse en el encuentro perfecto entre dos mundos : el japonés y el hispano.
La propietaria y gerente general de Maki Sushi, Beatriz de Monge, comentó que el negocio inició hace cinco años en la cocina de su casa, desde donde atendía pedidos a domicilio.
En 2011, logró que su proyecto avanzara hacia la modalidad “to go”, es decir, para llevar. Más tarde, la emprendedora se mudó a otro establecimiento, en la Zona Rosa, pero siempre resultó pequeño para la alta demanda. Esa fue la razón por la cual se trasladó a un lugar más grande, pero acogedor, siempre en la zona de la Colonia San Benito. Ese movimiento fue aprovechado para refrescar la imagen con un nuevo diseño.
En el restaurante predomina el concepto minimalista, que se integra con decoración oriental, específicamente japonesa.
“Es un ambiente acogedor, relajado, pero elegante, en donde los clientes pueden experimentar colores, formas y sensaciones, y celebrar el buen comer y beber”, afirmó de Monge.
En la actualidad, el restaurante cuenta con un menú que incluye 27 variedades de sushi y 9 diferentes tipos de salsas. Los alimentos son preparadas por chef profesionales, que han sido entrenados por japoneses.
“Es un reto para nosotros ver cómo la marca ha ido creciendo poco a poco, y que hemos logrado evolucionar en el concepto”, dijo.
El nuevo Maky Sushi combina diferentes estancias, en donde se pueden celebrar eventos familiares o corporativos.
En un futuro cercano, la empresaria proyecta comercializar la franquicia, pues hay personas interesadas en adquirirla, tanto a nivel nacional como regional.