MÉXICO. El Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Gobierno mexicano destacaron ayer la importancia de ampliar el acceso de la población a los servicios financieros para generar oportunidades de desarrollo y detonar un crecimiento económico vigoroso.
“La inclusión financiera puede ser un poderoso agente para propiciar un crecimiento vigoroso e incluyente”, afirmó la directora gerente del FMI, Christine Lagarde, al participar en un foro organizado por el Gobierno mexicano sobre el tema.
“Más de una tercera parte de la población mundial sigue estando excluida a nivel financiero”, indicó en una ponencia en la que enfatizó que avanzar en este tema es responsabilidad tanto del sector público como del privado.
Lagarde consideró un “imperativo económico” ampliar el acceso a los servicios financieros, sobre todo entre las mujeres y los pobres, pues ello contribuirá a cerrar la brecha de género y la desigualdad que prevalece en el mundo.
“Las 85 personas más ricas (del planeta) tienen tanta riqueza como la mitad más pobre de la población mundial”, apuntó la titular del FMI, quien subrayó que la desigualdad no solo es una cuestión moral que debe preocupar a todos, sino un asunto macroeconómico.
“Los países con una mayor desigualdad experimentan un crecimiento más bajo y menos duradero”, dijo Lagarde, quien llegó el miércoles a esta capital para analizar con las autoridades mexicanas la evolución económica del país.
“El crecimiento tiene que ser más incluyente para que sea más sostenible y para eso las finanzas tienen que ser más incluyentes”, apuntó ante el presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, miembros del gabinete federal, empresarios y banqueros.
En el caso de los pobres, el acceso a los servicios financieros puede generar enormes ventajas como “nivelar el consumo, aumentar la inversión en educación y salud, asegurarse contra eventuales siniestros y evitar así caer en una pobreza más profunda”, afirmó.
Sin embargo, la ejecutiva indicó que la inclusión debe ser administrada de manera “responsable” para evitar riesgos que puedan afectar la estabilidad financiera. Para ello, dijo, es crítico que “la información esté disponible y el principio de la transparencia se lleve a cabo”.
Es necesario “equilibrar la oportunidad y la innovación en los mercados financieros y, al mismo tiempo, salvaguardar el sistema para evitar los excesos tanto del lado de la oferta como de la demanda”, apuntó. —EFE