Más de 5,000 mil pequeños empresarios huyeron hacia el extranjero con todo y su familia, debido a los altos niveles de delincuencia que están azotando al país aseguró ayer Ernesto Vilanova presidente del Consejo Nacional de la Pequeña Empresa de El Salvador (Conapes).
“La fuga de pequeños empresarios ha empezado a partir de enero, este año. Nosotros no habíamos querido tocar ese tema, porque no le habíamos querido dar importancia. Pero nuestra sorpresa fue que en la zona central y oriente es donde más fuga hay en estos momentos”, explicó.
El Consejo lleva nueve meses realizando sus propias investigaciones sobre cómo está afectando la situación actual de la seguridad pública a los pequeños negocios asociados a esa gremial.
El último de los estudios corresponde al trimestre que comprende los meses marzo, abril y mayo, y para el cual fueron entrevistados 1,050 empresarios en todos el país, quienes concluyeron que ha habido un recrudecimiento de la violencia, un aumento en la cantidad de extorsiones, acecho constante de pandillas, cierre de negocios y una mayor desconfianza en la Policía Nacional Civil (PNC).
Con respecto a esta última consideración, las estadísticas de la encuesta realizada por una consultora privada para Conapes indica que el 76 por ciento de los empresarios entrevistados no confía en la PNC y, por ende, ese mismo porcentaje no las denuncia.
“Cuando la Policía dice que nosotros somos cómplices al no denunciar, nosotros le decimos que la PNC sabe que estamos siendo extorsionados y no hace absolutamente nada”, destacó Vilanova.
Conapes estima que sus agremiados pagan, en suma, cerca de $1.5 millones mensuales a chantajistas en todo el territorio nacional.
Según esa investigación, 90 de cada 100 empresarios respondieron “Sí” a la interrogante: ¿Cree usted que son muchos los PYMES (pequeños y medianos empresarios) que están siendo extorsionados?
“Hay personas a las que les preguntamos que por qué pagan la extorsión y respondieron que ‘es mejor pagar que morir’. Es una respuesta trágica, pero la consideramos como auto protección, porque no hay negocio que no esté siendo extorsionado”, acotó el líder empresarial.
Conapes rechazó las declaraciones del presidente Mauricio Funes sobre que el alza de homicidios obedece a tintes políticos y urgió una reunión con el gobierno entrante de Salvador Sánchez Cerén para abordar la problemática.