El presidente de la Corporación de Exportadores de El Salvador (Coexport) Pablo Durán, expresó que hasta finales de enero el sector de exportadores ha registrado pérdidas de 50 millones de dólares, como efecto de la “deficiente” implementación del sistema de rayos x, ya que debido a esto el flujo de camiones en la frontera ha disminuido causando retrasos.
Irónicamente, los exportadores están pagando $18 por esos retrasos. Por cada contenedor que cruza la frontera.
Por ello, y tras haber recibido la votación de la Asamblea Legislativa a favor del decreto que establece la suspensión por 180 días del cobro de los $18 por servicios de inspección no intrusivo, empresarios esperan que el presidente Mauricio Funes, sancione el decreto para poner en marcha el proceso.
El decreto tiene como objetivo eliminar el cobro de $18 durante 180 días para poder revisar el sistema de inspección no intrusiva y mejorar su funcionamiento. Para representantes del sector de exportadores, el decreto es una “decisión estratégica de desarrollo que permitirá que el país cuente con pasos fronterizos de alta calidad con sistemas óptimos para el fluido de documentación que permita el rápido movimiento de mercaderías y personas.”
Los retrasos en fronteras han generado costos extra para empresarios ya que deben pagar más viáticos a transportista, pagos en multa para los clientes o, en el caso específico del Puerto de Acajutla, gastos extra por la logística de los contenedores.
Se estima que un camión debería tardar cuatro horas en aduanas, pero el sistema ha retrasado el flujo causando que los camiones tarden hasta 24 horas en aduana. Con esto se calcula que un camión que viaja de El Salvador hacia Honduras o Guatemala y de regreso tardará 48 horas en lograr su paso a través de la frontera.
La preocupación de los exportadores es que las pérdidas podrían incrementar hasta 75 millones de dólares para finales de febrero si no se sanciona el decreto.
Esto implica pérdidas de trabajo en las empresas, pérdidas de contratos con clientes en el exterior y falta de recursos financieros que dejará de percibir el estado debido a que las empresas no podrán pagar impuestos de mercaderías exportadas.
Según un comunicado emitido por Coexport, “la única oportunidad de crecimiento sostenido a corto plazo que tiene El Salvador es aumentar sus exportaciones, ya que esto conlleva a dinamizar la economía a través de la generación de empleo, divisas y aumento de las inversiones; asimismo la generación de ingresos al Gobierno para cubrir sus necesidades del gasto público”.
La Corporación aclara que están de acuerdo con el sistema, pero les parece inaceptable que el mismo afecte la competitividad de las empresas de tal forma que pierdan exportaciones por su mala implementación y los costos del sistema.
De igual forma, Coexport registró que el sistema de rayos X ha tenido fallas, pero no hay personal asignado en las aduanas para solventar este problema.
Empresarios importadores y exportadores esperan que una vez sancionado el decreto, se pueden utilizar los 180 días para optimizar el sistema en cuanto a trámites, uso de medios electrónicos, transferencia de datos entre las instituciones involucradas, infraestructura en puntos fronterizos, definición de la aplicación del cobro y costos que van más allá de los 18 dólares, entre otros.
El último punto hace referencia al Puerto de Acajutla, en donde el sistema ha generado gastos que superan los 100 dólares debido al incremento en la logística que se debe realizar para trasladar los contenedores de un punto a otro.
Los exportadores esperaban lograr 6,300 millones de dólares a partir de este año en ventas al extranjero, esto representaría un crecimiento del 15 % anual, lo cual podría aportar 27.5 % al Producto Interno Bruto (PIB). Si no se logra solventar la situación en aduanas, esta proyección se verá afectada.
Otro punto que preocupa a muchos empresarios es que el sistema ha llegado a detener el flujo normal de los camiones que atraviesan las fronteras. Debido al sistema, cada camión atraviesa a 7 kilómetros por hora de velocidad, cuando deberían ser 15 kilómetros por hora de velocidad por cada camión.
Coexport expresa que lo que se debía pagar en un año a Cotecna-Smith, empresa que facilita los escáners, son 10 millones de dólares; sin embargo, esta ha generado un millón de dólares en el paso de un mes.
Esto significa que la aplicación del cobro de la tasa de servicios no intrusivos representa cinco veces más de lo que la empresa está estipulada a ganar. Durán considera que las ganancias generadas por el consorcio Suizo-Alemán contrasta con las pérdidas en exportaciones.