Sube de 7.67 % a 8.4 % interés que paga el Goes por bonos

La deuda que el país adquiere con inversionistas privados aumentó su precio debido a los resultados electorales pasados

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La deuda del Gobierno se hace más cara. Foto EDH/ archivo

Por Karen Molina /Agencias karen.molina@eldiariodehoy.com

2014-02-05 8:00:00

Las tasas de interés que el Gobierno deberá pagar con dinero público a los inversionistas privados que compraron bonos nacionales, subieron el martes hasta 8.51%, aunque ayer llegaron al 8.44 %, después que el precio de los eurobonos (deuda de largo plazo) cayera esta semana por el resultado electoral del 2 de febrero.

Hace menos de un mes (22 de enero) el Gobierno pagaba tasas de interés de 7.67 %, lo que significa que la deuda que el Estado ha adquirido a diferentes plazos se volvió más cara al conocerse los resultados políticos.

La caída de los precios refleja el grado de confianza que los inversionistas tienen en la deuda soberana de El Salvador, que sumado a una calificación crediticia, les ayuda a decidir si compran deuda estatal.

Entre más confianza proyecte el país, más inversionistas se muestran interesados en comprar bonos y estos bajan sus tasas de interés.

El Estado emite deuda para financiar sus proyectos cuando no tiene dinero efectivo.

Según datos del Ministerio de Hacienda, a diciembre 2013, el país tiene $4,840 millones en deuda a través de eurobonos, que son comprados por inversionistas locales y extranjeros.

Entre los locales se encuentran las Administradoras de Fondos de Pensiones (AFP), que son acreedores de aproximadamente el 30 % de los eurobonos.

Algunos de los bonos que han subido su precio en los últimos días vencen en 2025, en 2035 y otros en 2041, que fueron colocados en años anteriores. Pero también han subido las tasas de los bonos emitidos en noviembre de 2012, con los que el Gobierno financió el déficit fiscal de más de $800 millones que le faltaban en ese momento.

La Bolsa de Valores informó ayer que aún hacía un análisis de las causas que habrían provocado la caída del precio de los bonos, en tanto que el Ministerio de Hacienda no dio una opinión, a pesar de que el dato podría incidir directamente en la deuda del país.

Por su parte, el economista y Romel Rodríguez dijo que a pesar de que la caída de precios llega después de las elecciones presidenciales del 2 de febrero, lo cierto es que el mercado bursátil es muy volatil y explicó que lo que importa es analizar la tendencia que estos precios puedan tener en los próximos meses.

“Estos datos se mueven muy rápido. Esta vez han bajado, pero puede que luego vuelvan a subir”, aseguró.

Según el economista, será necesario ver la tendencia que tengan estos bonos a lo largo de este mes, previo a la segunda vuelta de las elecciones que se desarrollará el 9 de marzo.

El tema también será clave para ver el comportamiento de las inversiones de la empresa privada.

Rodríguez dijo que si bien aún no es certero el resultado electoral del 9 de marzo, los datos que ya se tienen servirán como insumo para los inversionistas.

Sube la calificación de riesgo a México

Mientras los inversionistas pierden la confianza en los títulos emitidos por El Salvador, en México, la agencia Moody’s otorgó a ese país la máxima calificación AAA, que significa que todos los instrumentos emitidos por ese gobierno tienen respaldo de pago.

El Salvador, por el contrario, ha caído en su calificación en los últimos años, lo que significa que el riesgo de que el Gobierno no pague una deuda a un acreedor ha crecido.

En México Moody’s aumentó la calificación de los bonos soberanos de México en un escalón a “A3” desde “Baa1” con perspectiva estable, al considerar un mayor potencial de crecimiento por la aprobación de las reformas estructurales.

“La decisión de actualizar las calificaciones soberanas de México se debió a las reformas estructurales aprobadas el año pasado, que Moody’s espera que fortalezcan las potenciales perspectivas de crecimiento del país y los fundamentos fiscales”, dijo la calificadora en un comunicado.

La firma es la segunda de las tres grandes calificadoras en elevar la nota del país ya que S&P la aumentó a BBB+ el pasado 19 de diciembre al destacar también las reformas económicas aprobadas por el Congreso de la Unión.

“La aprobación de un paquete de reformas representa un cambio estructural cuyo impacto a través del tiempo puede llegar a ser equiparable al que en su momento tuvo el TLCAN (Tratado de Libre Comercio de América del Norte) sobre la perspectiva crediticia del país”, agregó Moody’s.

Detalló que podría subir la calificación de México todavía más si hay un crecimiento sostenido por arriba de una tasa anual de 4 % y una tendencia a la baja en la deuda.