Segundo brote de roya provoca pérdida de mercado internacional

Desde hace dos meses, el hongo de la roya resurgió con más fuerza en los cafetales

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Desde hace dos meses atrás ha resurgido el hongo de la roya, provocando la caída del grano antes de su maduración. Foto edh/ archivoDesde hace dos meses atrás ha resurgido el hongo de la roya, provocando la caída del grano antes de su maduración. foto edh

Por Patricia García negocios@eldiariodehoy.com

2014-02-16 8:15:00

El segundo brote de roya que desde hace dos meses ha comenzado a afectar más drásticamente los cafetales, comienza a producir irremediables pérdidas para el golpeado sector cafetalero.

De acuerdo con el presidente de la Asociación Cafetalera de El Salvador, Sergio Ticas, el problema del hongo resurgió hace dos meses y se ha reproducido de tal forma que no es tan fácil de combatir y se continúa perdiendo el producto.

“Se necesita invertir en fungicidas triazoles que pueden detener la roya, sin embargo no todos tienen para hacerlo y por tanto se continúa perdiendo”, señala Ticas.

Para esta cosecha 2013-2014, se esperaba, según estadísticas del Consejo Salvadoreño del Café, una producción de 1,069,000 quintales de oro uva, según lo previsto en mayo del año anterior, sin embargo al 31 de enero de este año las cifras revelan que el objetivo no se alcanzará, ya que a la fecha se recolectaron 583,700 quintales y se estima una reducción del 58 % en la cosecha debido a la roya.

“La situación es crítica”, según el presidente de la Asociación Salvadoreña de Beneficiadores y Exportadores de Café, Abecafé, Marcelino Samayoa, “o comenzamos a renovar nuestros cafetales o se acaba la caficultura del país, y no vamos a ser el primer país que deja de ser productor de café”, argumenta.

Para el representante de Abecafé, si bien el problema se debe en gran medida al efecto de la roya, también factores como la falta de una política cafetalera, el abandono del parque cafetalero y problemas de seguridad que han alejado a productores de sus fincas, contribuyen a la baja producción.

“Tenemos una producción similar a la de 1913-1914, hace un siglo”, destaca Samayoa, “esto es espantoso, es una tragedia nacional de la que no nos hemos querido dar cuenta”, señala.

Por si fuera poco, debido a la baja producción de café que se espera para esta cosecha 2013-2014 atribuido al segundo brote de roya, El Salvador se verá afectado con la pérdida del mercado internacional que consume el producto.

Mercado internacional buscará otras ofertas

Según datos del Consejo Salvadoreño del Café, de la cosecha anterior, el mercado internacional consumió un millón 750 mil quintales, y este año, tal como se augura la cosecha, este mercado podría buscar en otros países la oferta del producto ya que El Salvador no abastecería la demanda total.

De acuerdo con los señalamientos del presidente de Abecafé, la baja en exportación de esta cosecha puede llegar a ser de hasta 70 % menos que la del año anterior, y “si se tiene suerte” podría llegar a ser de 600 mil quintales.

“El problema que tenemos es que el comprador tradicional de café de El salvador, se vaya a buscar café en otros orígenes y vamos a perder al menos, provisionalmente por uno o dos años, nuestro mercado tradicional”, apunta Samayoa.

Mientras que el año anterior en concepto de exportación se contabilizó un millón 750 mil quintales de café que generó un ingreso de un poco más de 250 millones de dólares, en esta ocasión “si se venden en el exterior unos 500 mil quintales, se tendría ingresos de apenas 65 millones de dólares”, advierte el presidente de Abecafé.

En la pasada cosecha 2012-13, los ingresos por la exportación de café salvadoreño cayeron 19.5 %, con 251,78 millones de dólares en ventas, frente a los 312,70 millones de dólares del período anterior (2011-12), de acuerdo con la información del sector.

Sin embargo, la pérdida de este periodo, según lo pronostican diversos representantes del sector caficultor rondará entre el 60 y 70 %.

Según lo reflejan los datos estadísticos del Consejo Salvadoreño del Café, en los últimos 5 años se ha tenido una tendencia a la baja en lo que respecta a la exportación del grano aromático.

La única cosecha que refleja un incremento en la venta del producto fuera del país es la de 2010-2011, en la que se exportaron 2,270,241 quintales de oro uva, por un valor de 459,772,041 millones de dólares, cifra que es proporcional a la producción del grano en ese periodo que contabilizó 2,614,000.0 quintales de oro uva.

Sin embargo, el panorama, como lo muestran los gráficos adjuntos, reflejan la decadencia del sector.

La solución para este problema que se atraviesa, como lo señala Marcelino Samayoa, está en renovar los cafetales, pero para ello se necesita financiamiento.

“Tenemos que renovar nuestros cafetales, pero para eso se necesita plata, necesitamos alrededor de 2,500 plantas por manzana y tenemos un parque cafetalero de 180 mil manzanas, es decir 450 millones de arbolitos, y el gobierno dice que cada uno tiene un costo de $0.45 centavos, necesitamos 202 millones de dólares aproximadamente”, apunta Samayoa.

Sin embargo, también argumenta que el precio de los árboles no es ese, sino que de $1 aproximadamente. “Entonces son 450 millones de dólares los que se necesitan para resembrar”, destaca.

El presidente de Abecafé, es enfático en señalar, que para que exista un resurgimiento del sector se necesita la unión de los caficultores, el gobierno y el sector financiero.

El café de El Salvador, según lo explica Marcelino Samayoa, es reconocido, no como el mejor del mundo, pero si como el más regular, “es el más estándar del mundo, porque todos los años es la misma calidad y estos patrones son excelentes”, destaca.

Entre los países a los que se exporta el grano está: Estados Unidos, con 50 %; Europa con 30 % y lo restante a mercados especiales como Japón, Corea, Taiwán, entre otros.

Miles de empleos perdidos

El problema del hongo de la roya que ha provocado la caída en la cosecha actual de café, no es el único problema que enfrenta la economía del país.

De acuerdo con Sergio Ticas, desde la cosecha pasada hasta la fecha se han perdido 60 mil empleos en el sector.

Según lo refiere, uno de los factores que más preocupa al sector es el impacto laboral, ya que con la pérdida de empleo viene la delincuencia y con esto se suma el problema de inseguridad que se vive.

“Hay mucha gente haciendo fila para que se les de trabajo y nosotros cómo vamos a dar trabajo si no tenemos dinero ni para hacer actividades para nuestra fincas”, afirma Ticas.

Los datos del Consejo del Café, reflejan que durante la cosecha 2010-11 se contabilizaron 130,700 empleos, y en este periodo 2013-2014, se redujo a 53,450.

“Con esta pérdida (refiriéndose al café) de donde vamos a mantener los salarios y a la gente que vive del café?”, se cuestiona el dirigente de Abecafé, que además considera que el problema podría prolongarse aun más, si no se toman las medidas necesarias para encararlo.