A menos de un año de haber nacido, Banco Azul de El Salvador ha agrupado ya más de 1,412 accionistas, quienes ahora son socios de la institución financiera, que se prepara con miras a iniciar operaciones en el segundo trimestre de 2014.
El banco se constituyó oficialmente en septiembre pasado, con un capital inicial de 20 millones de dólares, tal como lo demanda la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF). Este monto fue inscrito en la Bolsa de Valores de El Salvador (BVES).
Para contar con un capital más robusto, el banco decidió hacer un segundo llamado de accionistas, con la intención de que también participaran personas naturales y jurídicas, incluyendo pequeños, medianos y grandes inversionistas.
El éxito del segundo llamado se reflejó en la cantidad de personas que acudieron a la institución, no sólo a pedir información, sino dispuestos a ser socios de la nueva entidad financiera, cien por ciento salvadoreña. El valor nominal de la acción fue de 1 dólar.
Al final, un total de 1,412 personas inscribieron sus acciones, alcanzando así un capital adicional por 40 millones de dólares, los cuales también serán inscritos en la BVES con la intención de que los accionistas puedan efectuar transacciones en el mercado bursátil.
La solicitud de autorización del aumento de capital será enviado esta semana a la Superintendencia, y se espera que la operación haya sido aprobada a finales del segundo trimestre de 2014.
Con esa segunda transacción se completarán 60 millones de dólares de capital inicial, con los que esperan arrancar operaciones en el segundo trimestre del año, informó el presidente del Banco Azul, Carlos Araujo.
“Nuestra proyección era constituirnos con unos mil accionistas fundadores, pero con el llamamiento de capital por 40 millones de dólares se han superado los 1,400 accionistas”, expresó Araujo.
El vicepresidente de Banco Azul, Alfredo Pacas, afirmó que con el total de accionistas que ahora posee el banco se logró superar en un 40% la expectativa que se tenía de la participación accionaria.
“La respuesta de ese importante grupo de accionistas es un voto de confianza en nuestro banco, y además confirma el espíritu emprendedor de muchos salvadoreños”, dijo Pacas.
El empresario detalló que la participación accionaria fue diversa, pues el 53% corresponde a hombres, el 44% a mujeres. Del total, un 97% son personas naturales y un 3% empresas.
Destacó, además, que los empleados son parte de los accionistas del banco, y por lo tanto, socios de la empresa naciente. “Eso tiene una connotación muy importante desde el punto de vista de la motivación que tendrán en la atención a nuestros clientes. El servicio de Banco Azul será relevante, personalizado, y con el calor de un socio”.
El director ejecutivo del banco, Armando Rodríguez, comentó que los 10 socios fundadores se sienten muy halagados porque “hay otras 1,400 personas que creen El Salvador, que también le están apostando al país, invirtiendo en las acciones de Banco Azul”.
Rodríguez detalló que el próximo año, el banco abrirá un total de 10 agencias en todo el país, de las cuales 7 se ubicarán en el Área Metropolitana de San Salvador, y el resto en las principales cabeceras departamentales del país.
Se estima que en el primer año de operaciones, el banco alcanzará una cartera de créditos de 60 millones de dólares.