AES, una de las distribuidoras de energía eléctrica más grande del país, procura el desarrollo sostenible, a través de sus programas de electrificación rural con el que llevan el servicio de energía eléctrica a los lugares alejados de las zonas urbanas.
Este programa se ha ejecutado en conjunto con otros organismos nacionales y ha beneficiado a más de 70 mil familias en todo el país.
“Es un proyecto costoso en el que se invierte mucho en conexiones que consumirán poco, pero implica la transformación de miles de personas”, comenta Virginia Trujillo, directora de comunicaciones y relaciones externas.
Cuentan con un programa de educación que busca el uso eficiente y seguro de la energía eléctrica por parte de los clientes, con programas educativos como el de Energía Mágica a través del que educa a niños en centros escolares, también imparte charlas de prevención de riesgo eléctrico, capacitación sobre seguridad industrial y uso de herramientas básicas, programas de reciclaje, entre otros.
La compañía posee programas de RSE a nivel de sus colaboradores como: acercamiento con los jubilados, pequeños inversionistas, con contratistas y proveedores.
“El trabajo de RSE es un aspecto de cultura organizacional y de orgullo del trabajador por la empresa y está muy relacionado con nuestro accionar en El Salvador”, afirma Trujillo.
Asegura que todo el trabajo de responsabilidad social incide en que la gente se siente contenta de laborar en una empresa que es socialmente responsable, además como institución ganan reputación entre la población.
A los grandes clientes también se les orienta sobre el consumo eficiente de sus plantas, evaluación de sus condiciones energéticas y programas de educación para sus empleados.
Realizan seminarios de eficiencia energética para el sector comercio, de la mano con la Cámara de Comercio en sus filiales de San Salvador, San Miguel, Santa Ana, Sonsonate y La Unión.
En medio ambiente, promueven el reciclaje de papel en sus oficinas, comunidades y centros escolares. “La producción de papel igual que la de vidrio es una de las que más energía eléctrica consume, es decir en medida que lo reciclemos, estamos haciendo que se consuma menos energía en el país “, dice Trujillo.
El producto de la venta de papel, se dona a un programa ambiental en pro de la tortuga marina. Desarrollan un programa de prevención de la violencia en jóvenes a través de la transmisión de conocimientos tecnológicos, que les ayudan a leer medidores, notificación de facturas y ventas… con opción a acceder a un empleo.