En los últimos años, Avianca ha venido insistiendo en la urgente necesidad de modernizar y ampliar el Aeropuerto Internacional de El Salvador para poder continuar con sus planes de expansión del centro de conexiones que opera en nuestro país.
Precisamente por esto, la aerolínea que le genera al aeropuerto el 50 % de los ingresos que tiene ve con buenos ojos el hecho de que por fin se vaya a iniciar un proceso de modernización y rehabilitación del aeródromo, el cual no ha sido intervenido físicamente desde 1989, con excepción de trabajos de mantenimiento.
La línea aérea también le ha dado el visto bueno a la titularización (financiamiento en el mercado bursátil) que el lunes pasado realizó la Comisión Ejecutiva Portuaria Autónoma (CEPA) por un monto de $58.3 millones para emprender 41 obras de mejoramiento.
Roberto Kriete, presidente de la junta directiva de Avianca, aseguró ayer en una entrevista televisiva que el proyecto de modernización es ambicioso, pero que no está lejos de la capacidad de ejecución de la autónoma, que ahora dispone de los fondos.
“Ya se tiene el dinero y se están preparando las licitaciones. Es un proyecto que se está ejecutando, no se está soñando; para nosotros el escenario ha cambiado dramáticamente… Tenemos un aeropuerto en vías de modernizarse y CEPA está haciendo lo necesario para llevarlo a cabo”, expresó.
No obstante, aseguró que la falta de capacidad que tiene actualmente el aeropuerto ha limitado el ritmo de expansión de la compañía, que siempre ha señalado las principales deficiencias que tiene el aeródromo.
Una de las críticas que con frecuencia ha señalado la aerolínea es el nivel de deterioro que ha alcanzado la infraestructura, frente a otros de la región que sí han invertido en mejorar sus aeropuertos.
Los atrasos o cuellos de botella que se forman en las zonas de migración y aduanas también afectan, dice Kriete, quien considera que en este punto tienen responsabilidad las autoridades de Migración.
En su opinión, para mejorar en estas áreas se requiere de la asignación de más personal de Migración para agilizar el chequeo de los pasajeros.
“Hoy por hoy las áreas de migración son un desastre… Las colas que se hacen en el aeropuerto no sólo son un problema de infraestructura, sino de gente (pocos empleados de migración)”, comentó.
El mismo presidente de CEPA, Alberto Arene, reconoció que las filas que los pasajeros hacen en ingresos y salidas del aeropuerto llegan al punto de violar los derechos humanos.
Arene considera que el financiamiento recientemente obtenido permitirá la instalación de tecnología de avanzada, la modificación del área de mostradores de las aerolíneas, con lo que se espera hacer los procesos más eficientes y reducir los tiempos en un 75%.
Detalló que el plan de modernización incluye una plaza de comidas en la terraza de observación y una nueva política comercial que permitirá hacer del aeropuerto un “shoping mall” muy atractivo.
El funcionario acepta que con este tipo de obras no se resolverán por completo las dificultades, pues definitivamente el aeropuerto necesita ampliarse, en especial en las áreas de servicios, mostradores, migración y aduanas.
“Mientras tanto, vamos a avanzar en el proyecto de rehabilitación que permitirá eficientizar el manejo de espacios, de flujos de pasajeros, de área de carga y equipajes, para administrar mejor el tiempo en los tres principales bancos de vuelos”, dijo.
Superadas las dificultades, no sólo Avianca emprendería sus planes de expansión de sus operaciones, sino también Aeroman, que ha anunciado la intención de edificar cuatro cinco bahías de mantenimiento de aeronaves.
CEPA informó también está semana que el plan de rehabilitación y modernización, que se ejecutará en 18 meses, permitirá dar un salto de calidad en los servicios que ahí se prestan.
El proceso de modernización de la terminal aérea cuenta con el apoyo de las Naciones Unidas, tal como confirmó Roberto Valen, representante residente del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD).
La autónoma informó ayer que en forma paralela ejecuta el proyecto de actualización del plan maestro, que incluye las proyecciones de demanda, análisis de la actual terminal y opciones para la ampliación.
El plan definirá los rasgos técnicos para mover el aeropuerto hacia un futuro deseado bajo las normativas de la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI).