La alcaldía de San Luis de la Reina, de San Miguel, suspendió el permiso para la construcción de la central hidroeléctrica El Chaparral, confirmó el secretario municipal, Antonio Márquez.
El funcionario explicó que debido a que la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (Cel) rescindió el contrato de construcción del proyecto con la compañía italiana Astaldi, el concejo tomó la decisión de retirar los permisos a la autónoma.
Confirmó que con fecha 29 de noviembre del año pasado le enviaron una carta a la Cel explicándole que “quedaba revocada la licencia de construcción, por motivo que había rescindido o terminado el contrato con Astaldi”, dijo.
Márquez leyó parte de la nota en la que se expresa que “por el retiro de la obra de la empresa constructora Astaldi S. p. A. sucursal El Salvador, por medio de la presente se revoca la licencia de construcción girada por esta alcaldía a los 16 días del mes de diciembre del año 2010, que fue cuando se emitió el permiso, aclaró” (Ver carta).
El secretario municipal explicó que al haberse rescindido el contrato entre Cel y Astaldi, los permisos que la alcaldía dio para la construcción de la obra y la operación del constructor en el sitio del proyecto prácticamente ya no tienen razón de ser, por lo cual se suspenden.
“La licencia de construcción se revoca o se suspende, por motivos de la terminación del contrato con Astaldi, porque el mismo permiso iba relacionado que le daba permiso a Cel y que el constructor iba a ser Astaldi”, dijo.
“Ahora al cambiar de constructor tiene que ser otro permiso para el rediseño, incluso se necesita que la Cel obtenga otra licencia para el nuevo prediseño, que todavía no han sido solicitados por la Cel”, confirmó.
El funcionario municipal añadió que como en la carta que le mandaron al presidente de la Cel, la municipalidad se refiere a varios puntos relacionados con la presa. “El (presidente de la Cel) nos ha propuesto una reunión para resolver todos esos temas, pero todavía no le hemos respondido para cuándo”, confirmó.
Otras alcaldías
Por su parte, el alcalde de Carolina, José Florentino Rivas, que también se verá afectado por el embalse, aseguró que en la sesión del concejo del próximo 20 de febrero revisarán o crearán otra ordenanza para que la Cel pague el impuesto adicional que cause el rediseño de la obra, porque lleva un costo más alto.
“El 20 (de febrero) que voy a estar reunido con el concejo es el tema principal que vamos a tratar, (además) de los compromisos que tiene la empresa Cel con el municipio, porque la verdad en estos nueve meses que yo he estado no han apoyado como al alcalde anterior”, dijo.
A pesar que Rivas es del partido ARENA no habló de suspender permisos, sino de modificarlos, para que en la medida se incremente el costo de El Chaparral, de la misma manera la Cel debe pagar mayores impuestos municipales.
También fue claro al afirmar que “yo como alcalde no me voy a oponer al desarrollo de mi municipio; si la comunidad lo ve bien, entonces, por lo tanto, solo voy a exigir el impuesto apropiado según lo que la ley ordene”.
Rivas confirmó que por los permisos anteriores emitidos durante la administración municipal del FMLN, la autónoma pagó, en el 2010, un millón 460 mil dólares, de los cuales él solo recibió 48 centavos, al tiempo que desafió a la Corte de Cuentas para que haga una auditoría que determine en qué se gastaron ese dinero las autoridades.
El jefe edilicio de Carolina confirmó que también el alcalde de San Antonio del Mosco está listo para modificar la ordenanza, a fin de que la Cel le pague más impuestos municipales.
La obra se paralizó desde junio de 2010, mientras se determinaba si debía moverse el sitio de la presa.