Buscan alternativas para mantener en buen estado la red vial

Con la experiencia de Costa Rica, El Salvador pretende reforzar los atrasos y rezagos en materia de carreteras y caminos vecinales

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Uso de cemento o asfalto en carretera no es símbolo de desarrollo, porque hay sectores donde no es oportuno.

Por Jaime López comunidades@eldiariodehoy.com

2013-01-23 7:00:00

El Foro Económico Mundial, organismo que mide la competitividad en diferentes rubros de las naciones, ubica al país entre los primeros cuatro lugares en calidad de carreteras.

Pero esa posición podría revertirse de no contar con un verdadero plan de mantenimiento de vías urbanas y rurales en el país.

Para evitar retrocesos, autoridades del ministerio de Obras Públicas, alcaldías y sociedad civil se reunieron ayer con sus homólogos costarricenses y representantes de la agencia de cooperación alemana GIZ.

El ministro de Obras Pública, Gerson Martínez reconoció que pese a los avances, el país todavía presenta rezagos en obras viales y es necesario retomar las buenas experiencias de países amigos como Costa Rica.

En ese país, más de 1,050 kilómetros de caminos rurales han sido rehabilitados. Gracias a esos esfuerzos se han acortado distancias en rutas del transporte de pasajeros, mejorado la accesibilidad a zonas de influencia, así como mejorado el acceso a otros servicios como salud, educación, telefonía y reducción de la contaminación.

Las obras en carreteras y caminos deben impactar en cuatro o cinco áreas dijo el titular del MOP.

En el área de pobreza estas obras deben acelerar el desarrollo sustentable, crear polos generadores de riqueza, mientras en el mapa de suelos se debe respetar las áreas protegidas de cuencas y micro cuencas, de acuerdo con la vocación y naturaleza de cada zona.

Martínez también aseveró que en las obras viales se debe valorar los niveles de violencia, porque la industria de construcción es multiplicadora de la economía, que a falta de opciones incide en la criminalidad.

Por ejemplo el Fovial contrata empresas que dan empleo a mano salvadoreña.

Las carreteras nacionales deben integrar regional y físicamente a la región centroamericana. “Para mi el mantenimiento sólo puede ser sostenible si está sustentado en la contribución del gobierno central y municipales, también los gabinetes departamentales, y dinamizar aún más las redes de convenios del MOP con las comunidades y sector privado”, subrayó.

No basta con mantenimiento rutinario de las vías rurales sino avanzar hacia tecnología s estabilizadoras, amigables al medio ambiente.

Las nuevas tecnologías deben ser opciones al uso del cemento o asfalto en ciertas zonas. “No es sinónimo de desarrollo, sino de desastres naturales porque reduce la absorción del suelo”, piensa.

En el conversatorio participó el ingeniero Eduardo Barquero, uno de los artífices del “Modelo gestión de la conservación vial para los caminos rurales en Costa Rica”.

La finalidad de este encuentro es conocer mecanismos que permitan planes alternativos de mantenimiento en carreteras y caminos rurales.

En El Salvador se busca un modelo de conservación vial participativo entre las instituciones y organizaciones de cada sitio del país.

Con esta visión se involucran componentes como descentralización de competencias y recursos a las municipalidades, fortalecimiento comunal, alternativas tecnológicas, sistemas de programación, monitoreo y evaluación; así como un inventario de la red vial cantonal.