Los dirigentes de las gremiales de transporte Asociación de Empresarios de Autobuses Salvadoreños (AEAS), Asociación de Transporte de Pasajeros (ATP) y la Federación de Cooperativas de Transporte en microbuses (Fecoatrans) estimaron, ayer por la tarde, que hoy el servicio estará reducido más del 85% a nivel nacional.
Argumentan que esto se debe a que muchos de sus afiliados que apoyan el aumento de $0.10 al pasaje urbano y 50% interurbano y departamental determinaron guardar sus unidades para no ser objeto de multas por parte de la Policía, como ocurrió ayer desde primeras horas del día.
De hecho, ayer por la noche el servicio de buses y microbuses ya estaba bastante reducido y muchos ciudadanos, en medio de las quejas por aumento al pasaje, tuvieron problemas para retornar a sus casas en distintos puntos del área metropolitana de San Salvador.
“Para mañana, lo que se espera es un servicio de transporte más deficiente”, dijo Genaro Ramírez, presidente de la AEAS, ayer por la tarde y varias horas después de que las autoridades de Transporte informaron que hasta las diez de la mañana habían impuesto 360 esquelas a unidades de rutas que elevaron tarifa.
El viceministro de Transporte, Nelson García, afirmó que hoy, a las 5:00 de la mañana, el gobierno tendrá transporte alternativo (buses amarillos y pick ups) a disposición de la población. Estos estarán concentrados en el sector del Instituto Nacional del los Deportes y Plaza Cívica.
Añadió que los usuarios que utilicen del transporte dispuesto por el gobierno cancelarán la tarifa establecida, es decir $0.20. García dijo que eso es por el gasto de combustible.
Acuerdos
El incrementar la tarifa y guardar las unidades ante posibles acciones de la Policía fueron acuerdos que los miembros y dirigentes de las tres gremiales de transporte tomaron en una asamblea general realizada a fines de diciembre.
En ese encuentro, tanto Ramírez como Catalino Miranda, de Fecoatrans, y Roberto Soriano, de la ATP, explicaron que el aumento de pasaje responde a la reducción del subsidio planteada por el gobierno y ratificada por los diputados. Añadieron que no podrán salir adelante con el pago de combustible, la compra de llantas y de otros repuestos.
Los empresarios, quienes descartan que haya intereses políticos detrás de sus medidas, también demandan al gobierno que les cancele los meses atrasados que les debe en concepto de subsidio. En algunos casos les adeudan el subsidio desde julio.
Los dirigentes, bajo la asesoría del abogado Nelson Salvador García, declararon que el gobierno ha incumplido el Decreto 487, por lo cual tendrán que responder ante la justicia.
Al cierre de esta nota, la posición de las tres gremiales de buses y autobuses era la de no retroceder ante la medida y el gobierno sigue firme en aplicar la ley.
De hecho, el viceministro García dijo que retirarán la concesión y el permiso de línea a 619 unidades que han cometido faltas graves, como la del incremento del pasaje.
Gestión de Procurador
Ayer por la tarde se abrió la posibilidad de que los representantes de AEAS, ATP y Fecoatrans se reúnan con el ministro de Obras Públicas, Gerson Martínez, bajo la mediación del Procurador para la Defensa de los Derechos Humanos, Óscar Luna.
Luna hizo la invitación a Martínez y quedó en espera de una respuesta.
Los dirigentes gremiales buscan discutir con Martínez medidas que les permitan continuar operando, luego de la reducción del subsidio, entre ellas un ajuste de tarifa viable para ellos.
Pero la reunión, de concretarse, no sólo sería clave para los dueños de buses, sino también para los motoristas que trabajan en el sector del transporte público, puesto que, desde ayer, les redujeron los salarios, eso, bajo el argumento de que la reducción de subsidio no les permite salir adelante con los costos de operación como venían haciéndolo.
Rodolfo Espinoza, secretario general de la Asociación de Motoristas (Amos), afirmó que antes de las vacaciones de fin de año negociaron con los empresarios para que no aplicaran despidos que les habían anunciado, pero no lograron evitar que les redujeran sus salarios.
Espinoza afirmó que ellos ganan entre tres y cuatro dólares por viaje, y aunque dijo que los miembros del gremio están conscientes de que el recorte salarial tiene que ver con la reducción del subsidio, no dejan pasar de lado que esto será un tiro de gracia al bolsillo de la familia.
Y eso, según dijo, se agudiza por el hecho de que ayer los agentes de Tránsito les empezaron a imponer esquelas de $57.14 por el incremento de la tarifa del pasaje.
En ese caso, ellos han llegado al punto de que prefieren no sacar las unidades a trabajar hoy, para evitar que la Policía les continúe aplicando multas que, cuando llegue el momento de renovar la licencia, no podrán cancelar.
Ellos aseguran que no pueden estar pagando multas por aumentar las tarifas, por llevar vías dañadas, entre otros aspectos que son responsabilidad de los dueños de las unidades de buses y microbuses. Eso pese a que el viceministro de Transporte, Nelson García, aseguró que las multas no se aplican a la licencia de los motoristas, sino a la tarjeta de circulación.
Hasta ayer a las 9:00 de la mañana los de Amos daban cuenta de 100 esquelas impuestas a motoristas de la ruta 42 y 150 más a conductores de la Ruta 4.
La dirigencia de Amos pidió ayer al gobierno que revise la posibilidad de permitir a los empresarios incrementar la tarifa, porque es un hecho que el costo de las llantas y repuestos se ha elevado de forma tal que se hace difícil que sigan operando con un subsidio recortado.