Juicio contra capturados en operación Jaque se atrasa porque no localizan a reos en los penales

Los imputados serán juzgados por los delitos de lavado de dinero, extorsión y homicidio.

descripción de la imagen
Foto/ Menly Cortez

Por Jaime López

2018-04-03 8:58:12

El Tribunal Especializado Sentencia “C” instalaría este martes el juicio contra 91 cabecillas de la Mara Salvatrucha, transportistas y colaboradores quienes fueron capturados durante la Operación Jaque en julio de 2016.

De los 91 imputados, solo 26 han sido trasladados a los juzgados de San Salvador, los demás seguirán el juicio desde donde guardan prisión a través de los sistemas de videoconferencia.

Hasta las 4:00 d la tarde, la audiencia no había iniciado porque aproximadamente seis reos no han sido localizados en los penales.

Según el juez, no es un problema de la Corte Suprema de Justicia sino un problema del sistema de información de Centros Penales, quien habría hecho traslado de reos y no ubica a los procesados.

Además, el juez detalló que uno de los imputados identificado como David Ricardo Javier Guirola fue puesto en libertad, a pesar de estar incluido en el proceso.

Otro de los retrasos es que los abogados coordinan con los acusados si van a declarar a su favor, además de problemas con la energía eléctrica que afectan la zona.

De acuerdo con fuentes fiscales, “las plantas eléctricas no dan abasto con todas las pantallas instaladas en la sala del quinto nivel”.

TE RECOMENDAMOS:

Fiscalía entregará al Estado automotel Los Tres Ases, confiscado en operación Jaque

Según las autoridades, el auto motel Los Tres Ases servía para transacciones de droga

Los imputados son juzgados por los delitos de lavado de dinero, extorsión y homicidios.  El juicio está previsto dure hasta el 4 de mayo.

La Fiscalía cuenta con más de un centenar de testigos, así como documentos incautados y aparatos telefónicos con los cuales extorsionaban a sus víctima u ordenaban los homicidios.

A los implicados les atribuyen más de 200 homicidios cometidos entre 2015 y 2016; así como extorsiones que van de los 3 y 5 dólares en las comunidades cobrados a distribuidores de mercadería, a 3 mil dólares exigidos a civiles, comerciantes y transportistas

Como novedad en este juicio, Marvin Adaly Quintanilla Ramos, alias “Piwa”, quien de acuerdo a las investigaciones de la Fiscalía General de la República (FGR) era un supuesto pastor evangélico que manejaba las finanzas de pandilla MS, no será juzgado en este proceso por estar en una etapa anterior del proceso o instrucción, al igual que otros 17 detenidos en la Operación Jaque.

De acuerdo con las autoridades, Quintanilla Ramos se encuentra todavía en etapa de instrucción, por lo que no se ha definido su situación jurídica en esa fase y no será objeto de juicio.

Foto/ Menly Cortez

Durante las detenciones del Piwa y otro centenar de pandilleros y supuestos colaboradores de la estructura, las autoridades revelaron que él habría ordenado asesinar a 50 mareros que se habrían rebelado contra los jefes de la agrupación delictiva.

Uno de los primeros pandilleros en morir a manos de otros integrantes de la pandilla fue Walter Antonio Carrillo Alfaro, alias El Chory, quien había intentado dividir la MS para ser el máximo cabecilla de lo que sería la “Mara Salvatrucha Revolucionaria”, como en cierta ocasión se le escuchó gritar dentro del centro penal de Izalco, donde fue asesinado el 6 de enero de 2016 junto a otros tres mareros.

En la Operación Jaque, las autoridades realizaron numerosos allanamientos y decomisaron decenas de vehículos e inmuebles.

Vehículos decomisados durante la operación Jaque.

Durante la audiencia de imposición de medidas, en agosto de 2016, se conoció que Quintanilla Ramos recibía un sueldo de 600 dólares y era propietario de no menos de 29 vehículos. Además, la jueza del caso dijo que, según testigo de cargo, la pandilla recibió 25 millones de dólares durante la tregua pactada por las pandillas en 2012, durante el gobierno de Mauricio Funes.

También se supo que la MS negoció tres ametralladoras M-60 que fueron robadas en el Regimiento de Caballería, en San Juan Opico, La Libertad; que la estructura desarticulada no se dedicaba al narcomenudeo, sino que sus operaciones de droga eran de mayor escala y que los cabecillas de la pandilla se reunían en el lago de Ilopango para diseñar estrategias a seguir durante el pacto entre los grupos criminales.

TE RECOMENDAMOS:

MS planeó vengar el golpe de la operación Jaque

Pandilla pretendía mostrar que las autoridades se equivocaban al presentar los logros del operativo realizado en julio