Krisia y Fernado, ambos menores de edad, viajan todos los días desde San Julian, en Sonsonate, para visitar a su bebé de cuatro meses que llevaba, ayer, 12 días de estar ingresado en la unidad de Cuidados Intermedios del hospital Nacional Benjamín Bloom, a causa de una bronconeumonía.
Ambos están preocupados porque no tienen dinero para comprar el medicamento Oseltamivir, recetado para tratar al niño.
Dos madres, que también han tenido a sus hijos ingresados y que compraron el medicamento, les donaron el fármaco que ya no utilizaron para que ellos pudieran iniciar el tratamiento de su primogénito.
“No tengo dinero y no estoy trabajando, además no se cuánto tiempo se va a tardar en recuperar”, dijo el padre, quien está angustiado porque no sabe si la cantidad de medicina que le regalaron es suficiente para tratar a su bebé o si necesitará más. Además, están teniendo problemas para poder pagar sus viajes desde su municipio al Bloom.
Otros padres de pacientes ingresados en la unidad de Cuidados Intermedios coinciden en que inicialmente sus niños fueron tratados como resfriados comunes, pero han terminado delicados en el Bloom.
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“Yo le dije al médico del cansancio de la niña; el médico me dijo que no iba cansada, que si iba cansada era porque tenía fiebre. El médico me dijo que la niña estaba bien”, relata una madre que tiene a su pequeña de 11 meses ingresada en Cuidados Intermedios y que pidió omitir su nombre por temor a que le traiga alguna consecuencia en la atención de la niña.
La madre añadió que al consultar por tercera vez en el hospital Zacamil, la pequeña fue referida al Bloom intubada, donde le detectaron “principios de influenza, probablemente eso era, porque muy rápido le había afectado los pulmones a la niña”, dijo la madre.
“Me la mandaron intubada porque la niña ya no podía respirar por si misma, hasta moradita se ponía ya”, narró.
Los síntomas que la pequeña había presentado cinco días atrás fueron fiebre, tos seca y estaba desganada.
Este madre añadió que debido a que el Bloom no tenia los fármacos, ella ha comprado Flixotide y Oseltamivir, el primero con un costo de $30 que compró en el país y el segundo lo mando a traer a Guatemala.
Personal del hospital Bloom, que pidió omitir su nombre para evitar sanciones laborales, confirmó que desde inicio del año, no había oseltamivir en ese sanatorio para tratar a los pacientes.
Para ayudar a Fernando y a Krisia se puede comunicar al 706-75015