Productores de sandía afectados debido a que el fruto se mancha y hay exceso de agua

Los agricultores del sector están desesperados por las pérdidas, las cuales van en aumento

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Por Insy Mendoza

2017-06-22 7:13:30

Un aproximado de cien productores de sandía de las comunidades El Nacimiento, Los Mangos, El Jícaro, Las Maderas, del cantón Siramá; y El Jícaro, ubicados en el municipio de La Unión, tienen pérdidas en sus cosechas a consecuencias de una mancha que aparece en la fruta cuando está en su etapa de maduración y posterior a ser cortada.

Los afectados aseguran que la mancha provoca que la sandía se reviente y en esas condiciones los comerciantes no quieren comprarla, lo cual se traduce en pérdidas económicas. Los agricultores explicaron que hace tres años ocurrió lo mismo.

Aseguraron que hasta el momento, no han recibido ninguna asistencia técnica del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).

Bryan Reyes, uno de los productores, dijo que en una hectárea de cultivo están perdiendo alrededor de $500 dólares: “La sandía la están comprando barata y, a parte de eso, estamos botando muchas por esa plaga que nos ha caído y que nos llega a 20 días antes de hacer la corta”.

Los productores han buscado recomendaciones de algún veneno en los agroservicios, pero el insecticida que les recomienda usar no tiene ningún efecto para eliminarla.

Jorge Bonilla, otro afectado, dijo que están gastando 1,500 dólares para sembrar una hectárea de sandía y “de eso se esta perdiendo la mitad”. Agregó que el sector nunca ha recibido asistencia técnica.

La Gobernadora de La Unión, Grisia Hernández, indicó que algunos productores de sandía ya le notificaron el problema y pedirá al Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (Centa) que envíe expertos a verificar lo que pasa y, a partir del informe que rindan, buscarán los mecanismos para apoyar a los agricultores.

Mientras, los productores del caserío Condadillo Volcancillo, en La Unión, resienten daños provocados por el exceso de agua.

Fidel Vásquez, explicó que el exceso de lluvias llegó cuando el fruto empezaba a madurar y provocó que se reventaran y se pudrieran. “Nosotros trabajamos con sistema de riego desde abril, pero con estas lluvias la mitad de la cosecha hemos perdido”.

Esperan encontrar una solución para combatir la plaga para evitar que las pérdidas vayan en aumento.