El más reciente balance contable de la empresa Vuelos Económicos Centroamericanos S.A. de C.V. (VECA) reitera lo que ha venido siendo una constante en años anteriores: la compañía está en números rojos, por lo que han optado por el cierre de sus operaciones.
Así lo confirma el consolidado de la contabilidad de la compañía correspondiente a 2016, en poder de El Diario de Hoy, el cual refleja una pérdida en la operaciones por $10.5 millones, por encima de los $2.1 millones que obtuvo como ganancias.
Esto implica que la empresa no ha mejorado sus perspectivas desde que comenzó a operar en 2013, todavía sin volar un avión y luego de recibir un importante financiamiento de la empresa mixta ligada al FMLN, Alba Petróleos de El Salvador.
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Tal como lo publicó este periódico en noviembre del año pasado, de acuerdo con el balance contable de VECA correspondiente a 2015, la empresa recibió de Alba Petróleos de El Salvador un importante inyección de fondos por $14 millones.
Alba Petróleos de El Salvador no solo ha invertido en la compañía, sino que además le ha prestado $5.9 millones, según el informe de contabilidad de 2015.
Por otra parte, la aerolínea, que ayer anunció el cierre de sus operaciones, refleja más de $21 millones de deuda y activos realizables a corto plazo de menos de $4 millones de dólares, lo que en otras palabras implica que aún liquidando la empresa, no le alcanzaría para pagar lo que debe.
La debacle financiera de la empresa también refleja que tampoco ha tenido un incremento en las ventas que le pueda asegurar un mejor futuro en sus finanzas; por el contrario, lo que está más visible es el comportamiento histórico de las pérdidas totales en cada año.
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De acuerdo con los balances contables desde 2013, la pérdida total se acerca a los $37 millones, lo que derivará en la pérdida del 100 % del capital, ya que al no haber actualmente activos realizables, al pagar la deuda bancaria y no bancaria, deberá responder con otras garantías y asumir una mayor pérdida a la que reflejan los datos contables, según se puede interpretar en el balance de contabilidad.
Eso desembocaría en el cierre de las operaciones de la compañía y la liquidación del pasivo laboral de todos sus empleados, que no está especificado ni reflejado en los informes contables actuales.
Asimismo, los números actuales de la compañía revelan que gastaron $1.7 millones en mantenimiento, un cantidad poco menor que las ventas totales.
En general, los números del 2016, sumados a los de periodos previos, permiten confirmar la incapacidad operativa y comercial del grupo que financió esta operación.
Comportamiento histórico contable
Cuando comenzó a volar su primer avión en 2014, VECA alcanzó ventas sólo por $45 mil y reflejó una pérdida de $958 mil, logrando ingresos abajo de los gastos por casi un millón de dólares.
Mientras, en 2015 la venta aumentó a $2.5 millones, pero la pérdida acumulada llegó a $17.5 millones, a lo que se pueden sumar $19.2 millones en firmas de activos que no representan ningún valor tangible.
Ante este escenario complicado, la empresa sólo tenía como salida que se le inyectara capital para salir a flote.
La empresa comenzó a caer desde que tuvo que devolver un avión, pues no tenía el suficiente recurso disponible para que funcionaran los dos con los que operaba la empresa.
Los dos aviones de la empresa eran arrendados, por lo que el arrendante de las aeronaves le habría pedido una de ellas ante el impago de la deuda por parte de la empresa.
De acuerdo con una fuente que pidió reserva de su nombre, el pasado 12 de enero salió el vuelo JTN7005 a las 9:08 de la noche desde San Salvador a Tucson, Estados Unidos, aterrizando a las 12:03 de la madrugada del 13 de enero.
Además de VECA, hay otras empresas ligadas a Alba Petróleos de El Salvador que están en aprietos financieros, como el caso de Arrocera San Francisco S.A. de C.V..
La información financiera de la compañía solo está disponible hasta el 31 de diciembre del 2014, fecha del último balance contable registrado en el CNR, pero la misma refleja que ha venido operando con pérdidas sostenidas desde que fue adquirida por Alba Petróleos de El Salvador.