Bebé fue herida en ataque a mujer ayer en Altavista

Pandillas están atacando a adultos sin importar matar a niños que están cerca de víctimas. El martes, una niña de 14 años murió durante ataque a pandillero en esa misma colonia.

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Entrada al hospital de San Bartolo, donde ayer murió la niña baleada el domingo.

/ Foto Por Menly Cortez

Por El Diario de Hoy

2016-02-14 8:28:00

Desde el pasado martes,  casi a diario las pandillas o maras han atacado a personas adultas sin importar que cerca de ellas estén niños a quienes parece no importarles matar.

En ese lapso, cinco niños han sido alcanzados por balas disparadas por pandilleros hacia adultos. Tres murieron.

Ayer se registró otro caso de esos, cuando una bebé de seis meses fue lesionada de bala en una pierna.

Este último hecho fue cometido a la 1:10 de la tarde en la Residencial Altavista, pasaje 5, block F, frente a la casa número 132.

De acuerdo con fuentes policiales, Julia Graciela Funes Cortez, de 23 años, estaba afuera de su casa, llevando en brazos a su sobrina de seis meses, cuando de repente se acercó un pandillero y comenzó a dispararle.

La joven, en un intento de proteger a la niña, le dio la espalda al asesino, quien continuó disparándole a pesar de ver que su víctima tenía a la bebé en los brazos.

Tanto Julia Graciela como la infante fueron llevadas al hospital nacional de San Bartolo, pero solo la bebé logró sobrevivir.

La Fiscalía y Policía hicieron dentro del sanatorio el reconocimiento legal de Julia Graciela, cuyo esposo fue asesinado por la misma pandilla 18 Sureños hace aproximadamente cuatro años, según explicaron agentes policiales destacados en Ilopango.

De acuerdo con fuentes de este periódico, el ataque podría estar relacionado al hecho en el que fue asesinado el esposo de Julia Graciela, por lo cual está preso un reconocido pandillero de la zona.

La madre de la bebé había llegado de visita a Altavista.

Tres niños muertos y dos heridos

En los últimos cinco días, las autoridades han registrado la muerte de tres niños que han sido alcanzados por balas disparadas a personas adultas cerca de quienes estaban.

El primer caso ocurrió la noche del martes anterior también en la residencial Altavista, sobre la calle Veracruz.

La víctima fue identificada como Katherine Roxana Motto Cañas, de 14 años, quien estaba en una tienda comprando cuando un pandillero fue atacado a balazos.

La niña fue alcanzada por dos balas en la espalda y aunque fue trasladada al hospital de San Bartolo, murió mientras recibía atención médica.

Katherine Roxana estudiaba noveno grado en un colegio de Altavista y cumpliría sus 15 años el próximo 20 de abril. 

En Michapa e Ilopango

El segundo caso se registró el miércoles en la noche,  en el cantón Las Delicias, municipio de Santa Cruz Michapa, departamento de Cuscatlán.

En ese hecho, los pandilleros atacaron a balazos a Héctor Antonio Andrade Salguero, de 41 años, mientras maniobraba para entrar su automóvil en su vivienda.

En el ataque, un niño de seis años resultó herido de bala en la cabeza. Era hijo de Héctor Antonio.

El niño fue llevado al hospital de niños Benjamín Bloom donde murió el jueves en la madrugada.

El pequeño estudiaba segundo año de kínder en un colegio privado de Cojutepeque.

Ese mismo jueves, en la comunidad Italia, de San Bartolo, municipio de Ilopango, fue lesionado de bala en la cabeza  Josué Adonay R., de dos años.

Junto al niño estaba un presunto pandillero, quien fue atacado a balazos. Éste sobrevivió al ataque, pues las heridas no fueron de gravedad. Sin embargo, Josué Adonay falleció mientras recibía atención médica en un hospital público.

Mientras tanto, el viernes anterior, un niño de siete años fue herido durante un ataque armado dirigido hacia su padre, José Isaías Hernández, de 31 años.

Este hecho fue cometido en el cantón El Ángel, municipio de Teotepeque, departamento de La Libertad. En este caso, el menor logró sobrevivir y está recibiendo atención médica en el hospital Bloom.

Ayer, tanto el arzobispo de San Salvador, monseñor José Luis Escobar Alas, como el Fiscal General, Douglas Meléndez, reprocharon estos hechos (ver nota aparte).