Recién operados se recuperan en pasillos por falta de cupos

Alrededor de 25 pacientes ingresados se mantenían en los pasillos de Emergencias. Médicos calificaron de crisis el problema de saturación de pacientes. 

descripción de la imagen

Más de una veintena de pacientes se recuperaban en los pasillos del Hospital Zacamil por falta de recursos adecuados.

/ Foto Por elsalv

Por Xenia González Oliva

2016-02-16 6:22:00

Recuperarse de una cirugía justo en el pasillo de la entrada a la sala de operaciones es la única opción que le ha quedado a  pacientes del Hospital Zacamil ante la saturación y falta de camas en los servicios de hospitalización. 

La mañana del martes, cuatro pacientes, incluido un niño, se recuperaban en el angosto espacio. 

El pasillo no llena las condiciones que requiere un paciente que acaba de ser intervenido, aseguraron médicos del Zacamil. Y Marvin, un paciente que fue operado de emergencia el lunes para extraerle la apéndice, estaba de acuerdo con la opinión. 

La idea de Marvin sobre una zona de recuperación en un hospital  no incluía una camilla estrecha y dura, al lado de una ventana abierta, sin malla que impida el ingreso de zancudos. Ayer su puesto estaba justo frente a unos portones por donde pasan constantemente médicos y trabajadores, acarreando otras camillas o carritos con insumos.  

“A todos los que ya nos han operado para acá nos mandan y de aquí nos mandan a bañarnos, a curación. Es bien feo estar acá”, comentó el joven de 29 años, que calculó que estaría en ese pasillo el resto de su estancia hospitalaria. 

No hay baños cerca de dicho pasillo, por lo que para poder bañarse o hacer sus necesidades los pacientes deben ser movilizados a otro lado y después regresan al área. 

“Se imagina tener que estarse moviendo tanto con ese dolor de haber sido operados recientemente”, expresó Milton Brizuela, cirujano del Zacamil. Añadió que el riesgo de que las heridas se infecten es alto. 

Una enfermera comentó que a veces llegan a tener hasta 12 pacientes solo en ese pasillo. Dijo que la situación implica un riesgo para la salud; no solo el espacio es inadecuado, sino que hay varios pacientes juntos, en distintas condiciones, algunos con heridas limpias y otros aún contaminados. 

El cirujano pediatra, Andréjulio Gregori, explicó que las enfermeras que deben velar por esos pacientes están asignadas a la sala de operaciones o en la recuperación posquirúrgica, pero son ellas quienes están pendientes de los que están encamados en los pasillos. 

“El problema no es solo para los pacientes, hay una sobrecarga laboral, por eso buscamos que ellos entiendan que no somos nosotros como médicos los que queremos que estén aquí”, expuso Gregori.

A pocos metros de ahí, las condiciones se vuelven más precarias para los pacientes que ya están ingresados en los pasillos del servicio de Emergencia. 

Esa mañana, el espacio y las camillas ya no eran suficientes para mantener a los 25 pacientes confinados en dicha área.  Una enfermera que llevaba a una joven en una silla de ruedas debía maniobrar para poder pasar en medio  de las camillas, mientras un grupo de médicos hacía rondas y chequeaba al resto de enfermos. 

“Hay pacientes que amanecieron sentados”, comentó un médico del área. 

En una de las sillas de plástico de la Emergencia, que es para los que aun esperan pasar a Observación y no han sido ingresados, había ya un paciente con su bata y conectado a un catéter. 

Uno de los médicos comentó que ya no tenían camillas para él y necesitaba ser movilizado para un examen.

“No es ni médicamente ni humanamente adecuado que estén en esta forma”, dijo Gregori.

Brizuela añadió que la situación ocurre de forma crónica en el Zacamil. Los médicos consideraron que la continua saturación de pacientes se ha convertido en una crisis para el hospital.  

Sostuvieron que la capacidad del hospital ha sido superada y no han recibido los fondos o personal necesario para atender la necesidad. 

“El sistema no está integrado, deberíamos saber si existen camas en otros hospitales para ser atendidos como se lo merecen”, dijo Brizuela.