Como todos los años, el sábado más cercano al 6 de enero, el Centro Español organiza su tradicional “Cabalgata de los Reyes Magos” para agasajar a los niños ingresados en el Hospital Benjamín Bloom y en el Hogar del Niño San Vicente de Paul, este último en el barrio San Jacinto de San Salvador.
Este año la actividad tuvo lugar ayer y, como siempre, comenzó a la 1:30 de la tarde en las instalaciones del Centro Español, ubicado sobre el Paseo General Escalón y la 83a. Avenida Norte donde se hizo alusión a esta tradición basada en los personajes bíblicos que llevaron oro, incienso y mirra, como obsequio al Niño Jesús que había nacido en Belén, de Judea, hace más de 2000 años.
Inmediatamente los tres personajes que representan a Gaspar, Melchor y Baltasar, los socios del Centro Español e invitados especiales, entre ellos el cónsul de España en El Salvador, Miguel Ángel García; y el gobernador político departamental de San Salvador, iniciaron la caravana con destino hacia el Hospital Bloom.
Esta tradición de entregar regalos a los niños del nosocomio inició por el año de 1940, pero en la década de los 70 se incorporó a la celebración a los internos del Hogar de Niño San Vicente de Paul.
“Desde entonces todos los años se repite esta misma ceremonia de dar los regalos aquí a los hijos de los afiliados (al Centro Español) y después salir en cabalgata hacia el Hospital Bloom y hacia la casa San Vicente de Paul”, dijo el diplomático español.
Además, explicó que los regalos se compran con dinero del Centro Español, se recogen de donaciones y se hacen actividades como cenas benéficas y otros eventos especiales, cuyo dinero recaudado se utiliza para adquirir todos los juguetes que se reparten.
Por su parte la vicepresidenta de dicha asociación de beneficencia, Carmen Calderón, comentó que al Hospital Bloom “llevamos cerca de 600 regalos porque nunca sabemos la cantidad de niños que van haber, y luego al San Vicente de Paul son como 250”.
La “cabalgata”, que inició a las 2:00, recorrió el Paseo General Escalón, la Alameda Roosevelt, para luego incorporarse a la 49a. Avenida Norte y Bulevar de Los Héroes hasta llegar al Hospital Bloom.
Una vez allí, comenzaron desde el nivel 10 a repartir los regalos que traían “desde el oriente” para los niños que son atendidos por diferentes padecimientos de salud, quienes mostraron sus mejores sonrisas, llenos de alegría por los obsequios que les iban entregando, uno a uno, los reyes magos.
Por su parte Nataly Mariela Pérez Díaz, de Usulután, quien cuidaba a su hijo, expresó su agradecimiento y felicidad por la llegada de los famosos personajes bíblicos, por los regalos que le llevaron a los niños.
“Pues uno se siente alegre y feliz, porque les alegra el rato a los niños, ya que por la forma en que están enfermitos, que es el motivo por el que están aquí, les llena de mucha alegría”, dijo la madre.
Concluida la repartición de juguetes en el Bloom, los míticos personajes y los miembros de la junta directiva del Centro Español partieron con rumbo al Hogar del Niño San Vicente de Paul, donde también alegraron el momento a más de 200 menores huérfanos que ahí están internados.
En este lugar fueron recibidos por las monjas que cuidan a los niños, quienes hicieron sonar una canción dedicada a los reyes magos que, a su vez, saludaron a los internos, les preguntaron si se habían portado bien y luego comenzaron a repartir los juguetes.