Hijo y padre, cuidándose mutuamente

??l y su padre están como refugiados en un albergue de La Cruz, Costa Rica

descripción de la imagen
Foto Por ??scar Iraheta

Por elsalvador.com

2016-01-11 7:09:00

Lorenzo se llama el padre y Lorenzo se llama el hijo. Ambos son adultos y hace dos meses decidieron salirse de Cuba. El hijo vendió su casa y su familia se quedó viviendo en la vivienda de su madre. Él y su padre están como refugiados en un albergue de La Cruz, Costa Rica.

Aseguran que viajar juntos fue lo mejor que pudieron hacer. “Nos cuidamos mutuamente. Él se siente apoyado por mí y yo por él”, admitió Lorenzo, el mayor, quien desglosó el costo por cada uno del viaje que hasta  Ecuador hicieron por lancha desde Cuba.

Cada uno tuvo que pagar 550 dólares al lanchero que los sacó de Cuba. Otros 30 dólares como pago de otra lancha y 80 más para un autobús que los llevó hasta  Ecuador, donde permanecieron varios días.

Luego, al nomás salir de Ecuador, unos policías colombianos les exigieron 50 dólares por dejarlos entrar de forma clandestina. Y después, para atravesar toda Colombia.

Los Lorenzo estiman que tuvieron que pagar aproximadamente 150 dólares en sobornos a policías y soldados.

¿Cómo les fue en el paso por Colombia?, les preguntó El Diario de Hoy. “No, ni se hable de eso. Allá es la misma Policía la que extorsiona, no lo hace el bandolero”, explicó con disgusto  Lorenzo, el mayor.

Ambos hombres dicen estar muy agradecidos con los costarricenses porque les ha provisto todo lo necesario todos estos días que han permanecido rezagados en su viaje. “La historia de lo que nos ha pasado aquí no es lo mismo que en Colombia. De aquí saldremos muy agradecidos”, aseveró.

Padre e hijo se pasan el día platicando entre sí sobre cómo y cuándo les tocará salir a ellos de Costa Rica. Para ellos, estos dos meses significan mucho en sus planes. Para sus parientes también. 

Cuanto más se tarden en llegar a Estados Unidos, más se tardarán en obtener su residencia en esa nación y los suyos en Cuba tendrán que esperar más tiempo para salir de la isla y reunificarse como familia.