Pandilleros que delinquen en la colonia 22 de Agosto, del cantón Lourdes, Colón, La Libertad, le arrebataron la vida a dos hombres mientras distribuían huevos en una tienda.
La víctimas fueron identificadas como Israel Sifontes, de 45 años, y su sobrino Nelson Sifontes, de 38 años.
Este último deja a tres niños en la orfandad, y era quien sostenía económicamente a su familia.
Una de los cadáveres quedó en la cama del pick up en el que transportaban la mercadería; el otro estaba junto a una de las llantas traseras del automotor.
El doble homicidio ocurrió alrededor de las 11:00 de la mañana. Hasta las 6:00 de la tarde de ayer las autoridades no habían terminado de procesar la escena.
En el lugar había una treintena de casquillos. Las autoridades presumen que los delincuentes cometieron el ataque desde un vehículo.
Según sus parientes, los hombres tenían varios meses de vender huevos pero nunca relataron que los hubieran amenazado de muerte.
En el mismo municipio, pero en un predio baldío del cantón Cinco Cedros, abandonaron el cadáver de un adolescente de entre 13 y 16 años.
Él no era conocido en el lugar, por lo que no pudo ser identificado.
La Policía presume que lo mataron en otro sitio y luego se deshicieron del cuerpo en la zona rural.
Además, René Hernández Clemente fue ultimado en el cantón El Cobanal, siempre en la jurisdicción de Colón.
Otra muerte violenta fue registrada en el cantón La Puebla, del municipio de San Matías, en La Libertad. La víctima tampoco fue identificada.
Localizan tres cadáveres
En diferentes hechos, los cuerpos de tres hombres fueron encontrados con señales de violencia.
El primero fue hallado en la colonia La Pradera, de San Miguel. Se llamaba Jorge Atilio Bonilla, tenía 17 años.
El cadáver de otro hombre fue localizado en la calle principal de la colonia Cedros, de Zaragoza, La Libertad.
El cuerpo estaba en una bolsa plástica y no fue posible identificarlo.
Mientras que la tercera escena del crimen fue procesada en la comunidad Cristo Redentor, de Ayutuxtepeque.
En otro hecho, la noche del domingo pasado fue ultimado a balazos Manuel de Jesús Ávalos Gil, de 39 años de edad.
El hombre trabajaba como mototaxista y tras haber terminado su faena se dirigía a su casa, situada en el cantón El Zunca, en Atiquizaya, Ahuachapán.
Alrededor de tres delincuentes lo interceptaron en el trayecto y le hicieron varios disparos. La víctima murió antes de que los lugareños pudieran llevarlo a un hospital.
Una de las hipótesis de las autoridades es que el señor fue asesinado porque se negaba a ser extorsionado.