El académico Alejo Vargas, quien es el director del Centro de Pensamiento y Seguimiento al Diálogo de Paz de la Universidad del Colombia, consideró que el proceso de paz de El Salvador es un referente para el país sudamericano, sobre todo en el tema de su implementación y cumplimiento a favor de las instituciones y de la sociedad.
Esto también fue secundado por el ex canciller de la República y firmante de los Acuerdos de Paz , Óscar Santamaría, quien, como parte del Grupo Salvadoreño de Amistad por la Paz en Colombia, afirmó que uno de los éxitos en el país es que se desarrolló un proceso “ejemplar” que culminó con la transición política y la alternancia en el gobierno a favor de la ex guerrilla del FMLN, hoy consolidada como partido político.
“Con Colombia hemos compartido la experiencia de negociación de los acuerdos pero sobre todo el trabajo posterior, porque de nada sirve un acuerdo plasmado como declaración de buenas intenciones si no se trasciende a la práctica, en eso esperamos que nuestro país se convierta en referente con esta nación amiga”, recordó Santamaría en representación del Grupo.
Al respecto, Vargas dijo que el eje central del acuerdo que se está construyendo entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y el gobierno de ese país está enfocado en la concertación y que este ejercicio “no es un intercambio de impunidades” si no que al expresión del interés de toda la nación sudamericana.
“En la mesa de negociación se tiene claro que una cosa es terminar el conflicto y otra es construir la paz. Los seis puntos del acuerdo que se definió en La Habana (Cuba) son un punto de partida para un largo camino”, indicó Vargas.
En ese sentido hay que recordar que ya se logró un acuerdo para solucionar el tema agrario, la participación política, las drogas ilícitas y la justicia de las víctimas (de ambos bandos). Solo están pendientes aspectos como el fin del conflicto y la implementación del acuerdo.
Vargas confirmó que el Consejo de Seguridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU) ya dio luz verde para que se conforme una misión política que verifique el alto al fuego, algo que “estimulará” el proceso, según dijo.