Varias alcaldías de la zona metropolitana de San Salvador y del interior del país se han sumado a los esfuerzos del Ministerio de Salud, en el combate de las epidemias del dengue, el zika y la chikunguña.
Para ello se han llevado a cabo visitas casa por casa, en coordinación con brigadas antivectoriales formadas por representantes de protección civil, unidades de salud, escuelas, Policía Nacional Civil y otras entidades de servicio público, como en algunos casos, Cruz Roja, además del sector privado.
Luego de la detección de los criaderos de zancudos han procedido a realizar jornadas de fumigación tanto en la zona urbana como en la rural, para tratar de disminuir el índice larvario, que según la Organización Mundial de Salud (OPS) no debe exceder del 4 por ciento.
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Algunas municipalidades, incluso, tienen vigente Ordenanzas que incluyen multas a quienes no destruyan y favorezcan, con ello, la proliferación del zancudo transmisor. Sin embargo no han sido aplicadas a la fecha.
San José Guayabal
En el caso de la comuna de San José Guayabal, el lunes 1 de febrero se reunirán con las escuelas y otros integrantes de la brigada antivectorial, para definir qué día de la próxima semana saldrán a aplicar la ordenanza contravencional, explicó el alcalde, Mauricio Vilanova.
El jefe edilicio aclaró que bajo ningún punto de vista están interesados en multar a la gente solo para hacer llegar fondos a las arcas municipales, sino que más bien se trata de hacer conciencia en la población para que colabore voluntariamente en la erradicación de los focos de infección.
Asimismo dijo que la ordenanza municipal no se ha aplicado porque el índice larvario lo mantenían más o menos controlado y tratando de no afectar a la población con retribuciones.
Sin embargo, lamentó que el indicador se haya elevado un poco, a raíz de lo cual se ha dado cuenta que “la única forma de hacerlos entender es aplicando las multas”.
Además dijo que “ahorita lo que llegamos a concluir es que ya no queremos gastar pisto en fumigaciones… porque cuando realizamos los controles vectoriales participa personal de distintas instituciones, incluyendo estudiantes que lavaban las pilas de las casas, pero cuando ellos están de vacaciones y se localizan criaderos la gente dice: es porque no han venido los alumnos a lavar las pilas”.
Por su parte la directora de la Unidad de Salud del municipio, Gertrudis Serrano, explicó que ellos continuarán con la búsqueda de personas con sintomatología de dengue, de chik y de zika, para darles el tratamiento oportuno.
“Además estamos dando charlas de prevención, la destrucción de criaderos, que se realiza en coordinación con jóvenes del Instituto Nacional. Salimos tres veces a la semana con un grupo de 50 jóvenes hacer la destrucción de los criaderos de zancudos”, dijo.
En cuanto a la imposición de las multas no es al azar por parte de la alcaldía, sino que la brigada antivectorial visita las casas y luego rinde un informe a la municipalidad para ponerla al tanto de en qué casas encontraron criaderos de zancudos para que imponga la multa respectiva.
Mejicanos
El municipio de Mejicanos, otro de los más afectados por dichas enfermedades, también tiene una ordenanza municipal que establece multas a quienes no destruyan los criaderos de zancudo, explicó el jefe de comunicaciones, David Araujo.
Sin embargo comentó que durante las inspecciones realizadas en los últimos 15 días, en el sector comercio y residencial, especialmente de la colonia Zacamil, no se detectó ningún foco de infección que ameritara multa alguna.