SANTA ANA. Para Ena Cruz, ver a su hijo Julio César, de 10 años, entusiasmado mostrando al pueblo de Metapán las piñatas y artesanías que elaboró durante cinco semanas, es una bendición.
El pequeño habitante del caserío El Ronco, en el cantón Tecomapa, del referido municipio, fue uno de los 671 niños que se graduaron la tarde del pasado miércoles del Programa de Desarrollo de Valores y Habilidades para la Vida, impulsado por Holcim, a través de la Fundación Cessa (FundaCessa).
Este nuevo programa, que busca fomentar el enfoque emprendedor y la implementación de valores, surgió en sustitución de la Escuela de Verano que existía desde el año 2006 y que era netamente recreativo.
Este año, niños desde los 8 años hasta jóvenes de 21, pudieron participar en seis diferentes cursos: artesanías, cocina, huertos caseros, mantenimiento de computadoras, pintura y dibujo y piñatería y artesanía.
Pero, además, también como un eje transversal se promovieron entre ellos valores como el respeto, la honestidad, responsabilidad, disciplina y amor a la vida, a través de talleres vivenciales realizados por Xperencial, una empresa especialista en el tema.
La directora ejecutiva de Holcim, Dolores Prado, explicó que este año se enfocaron en los valores para la vida y en implementar cursos que les ayudara a los niños para aportar a la economía del hogar.
La transformación de las escuelas de verano también se tradujo en un incremento en la participación de los niños y jóvenes de Metapán, confirmó Prado. “Me informan que estamos graduando 673 niños con una habilidad nueva; y entiendo que antes no llegábamos a esa cantidad. Entonces, se ha incrementado y les estamos enseñando cosas útiles”, reflexionó.
El nuevo programa
Según explicó el coordinador de Responsabilidad Social Corporativa de Holcim, Alfredo Vidal, el reenfoque del programa que se clausuró el miércoles surgió en el marco de la creación del nuevo Comité de Acción Participativa (CAP) que se creó en junio pasado.
“El CAP surge como iniciativa de Holcim para dar un nuevo enfoque a la gestión de Responsabilidad Social Corporativa (RSC); que consiste en invitar a los diferentes sectores de la sociedad metapaneca a conformar un equipo de trabajo para identificar las necesidades prioritarias del municipio”, dijo y agregó que fue así como en el seno del CAP surgió la necesidad de reenfocar las escuelas de verano.
La directora del centro escolar caserío Agua Fría y también miembro del CAP, Kenny Palma, consideró que el nuevo programa es positivo, “porque se aumentó la edad de los niños participantes, porque antes había niños que se quedaban sin hacer nada y ahora pudieron inscribirse en los cursos”.
Mientras que Sandra de Orellana, gerente de Responsabilidad Social Corporativa de Holcim, aseguró que este nuevo programa busca rescatar valores y enseñarle a los niños a desarrollar habilidades y capacidades para la vida, “que les permitan conocer el valor del trabajo, experimentar que los valores deben vivirse todos los días; y que si enfocamos nuestra vida con valores vamos a ser hombres y mujeres de bien”.
Durante la clausura del programa, que incluyó el cierre de actividades sociales 2015 de Holcim, hubo espacio para participaciones artísticas.
Una de las que robó la admiración de los metapanecos fue la presentación de los más de 200 niños que conforman la Orquesta Sinfónica Esperanza Azteca de Santa Ana.