A solo una semana de que el Ministerio de Salud haya confirmado la circulación del virus zika en El Salvador, la entidad ya reporta al menos 290 casos sospechosos de la enfermedad.
“Si nos mantenemos con una transmisión como la tenemos por el momento podríamos tener unos 500 a 600 casos a final del año”, calculó el viceministro de Políticas Sectoriales de Salud, Eduardo Espinoza.
Los casos sospechosos provienen de los 14 departamentos del país, de acuerdo a los datos de Salud;es decir que el virus zika ha logrado propagarse por todo el territorio nacional.
“Es a escala nacional. Las diez muestras eran de varias zonas del país”, dijo Espinoza en referencia a las muestras que enviaron a Estados Unidos para que fueran analizadas en busca del virus.
Tres de las muestras resultaron positivas a zika.
Espinoza informó que los casos se están reportando a diario y han pedido que se registren todos los que el gremio médico estaría identificando como sospecha de zika.
El funcionario añadió que tras haber confirmado que hay zika en el país ya no tienen la intención de seguir enviando muestras al Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC).
“Es suficiente para verificar estas cuestiones, únicamente vamos a llevar la contabilidad de los casos sospechosos”.
Espinoza dijo que los casos de zika serán identificados al ir descartando dengue y chikunguña.
Dengue
El ingreso del zika puede implicar más complicaciones en la salud de los salvadoreños.
Representantes de Salud han dicho que es posible que una persona padezca los tres virus al mismo tiempo o una combinación de dos de los virus. Además, los pacientes que ya padecieron dengue pueden volver a enfermarse con el virus si los pica un zancudo infectado con otro serotipo del dengue.
El dengue tiene cuatro serotipos.
Riesgos
Anteriormente el infectólogo particular, Iván Solano Leiva, señalaba los riesgos a los que está expuesto el país de que se genere una epidemia por zika similar a las ocurridas con el dengue y chikunguña.
Espinoza admitió ayer las posibilidades de una fácil propagación de la enfermedad en el país.
“Como tiene una rápida difusión porque tenemos índices larvarios que están por encima del nivel de seguridad entonces hay facilidad para que la enfermedad pueda diseminarse rápidamente”, expuso el funcionario.
Actualmente el índice larvario a escala nacional es de 11%, muy por encima del nivel que se recomienda para poder controlar al vector Aedes aegypti, que es de 4%.
Pero hay departamentos como San Salvador con un índice de 22%, le siguen La Unión con 16% y San Miguel con 13%.
Cuando el chikunguña se reportó por primera vez en el país apareció con un alarmante brote en el cantón Zapote Abajo, de Ayutuxtepeque.
Espinoza dijo que, por el momento, no tienen ninguna zona en particular donde se estén concentrando casos, aunque San Salvador, por sus condiciones de alto índice poblacional está reportando una cantidad considerable de sospechosos infectados con el nuevo virus.
Medidas contra el vector
“El combate contra el vector es lo más efectivo”, sostuvo Espinoza. Añadió que seguirán realizando los controles de foco en las zonas donde se reporten casos sospechosos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) ha emitido una guía de acciones que deben realizarse para luchar contra el zancudo transmisor del los tres virus.
La principal se centra en evitar que los zancudos encuentren sitios en los que puedan depositar sus huevos y reproducirse con facilidad.
Los depósitos en los que se almacena agua para uso doméstico deben limpiarse cada semana y mantenerse cubiertos. También es importante eliminar de forma adecuada los desechos, como botellas, latas, llantas y otros objetos que puedan acumular agua.
Ante los tres virus, los niños y las embarazadas tienden a ser los más afectados.