La inseguridad rodea al área protegida El Imposible

El Marn suspendió los recorridos nocturnos como medida de prevención

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La fauna, la flora y los ríos dentro de las 5,700 manzanas de El Imposible están bajo el cuidado de 8 guardarrecursos.

/ Foto Por Archivo

Por Lilian Martínez

2015-10-17 9:03:00

La noche del 16 de marzo, dos estudiantes de Biología y un guardarrecursos caminaban cerca de uno de los ríos que atraviesan el área natural protegida El Imposible en busca de murciélagos como parte de una investigación.

A eso de las 9:00 de la noche,  escucharon voces y vieron a cinco individuos con apariencia sospechosa. Los estudiantes y el guardarrecursos se sorprendieron, pues tenían entendido que solo ellos estaban en esa zona.

El subcomisionado Iván Rivas, de la División de Medio Ambiente de la PNC, detalló: “Dicen los muchachos estos, que comenzaron a rodearlos individuos desconocidos. Pensaron ellos que los querían capturar, que les querían hacer daño.  Por la misma necesidad de sobrevivencia, al final, tuvieron que resguardarse y lograron salir a las 5 de la mañana. Esa es la versión de ellos y la mantiene el guardarrecursos”.

A raíz de este incidente el Ministerio de Medio Ambiente y la ONG que colabora con la protección de los recursos naturales del parque, Salvanatura, acordaron que los recorridos nocturnos quedaban suspendidos.

El gerente de Áreas Naturales Protegidas del Marn, Nelson Arévalo, confirmó lo ocurrido y aseguró que la PNC les  advirtió que “todas las áreas boscosas y aisladas son espacios donde algunos grupos pueden desarrollar actividades ilícitas”. Si estos grupos son pandillas o no, Arévalo no pudo confirmarlo.

El gerente agregó que desde el Marn se le recomienda a los turistas, nacionales o extranjeros que “no deben andar solos”, sino que lo mejor es andar en grupo y hacerse acompañar de la PNC; sobre todo en los lugares donde no hay guías turísticos.

Álvaro Moisés, de Salvanatura, matizó: “Lo que usted menciona sobre este evento ha sido algo que nunca había sucedido en el parque”. Sin embargo, reconoce: “Esto fue un evento que nos llamó mucho la atención, que creemos que no son aislados. Son eventos  que pueden tener una connotación de pandillas o de tráfico de drogas, que puede vincularlos a ambos”.

Moisés basa esta afirmación en investigaciones llevadas a cabo en los últimos diez años sobre algunos “movimientos en el sector”.
El subcomisionado Rivas, por su parte, descarta que lo ocurrido esté relacionado con las pandillas.

Rivas afirma que él ha andado caminando por todo el parque a diferentes horas y que como división de Medio Ambiente se han coordinado con los puestos cercanos, el de San Francisco Menéndez en el sur y el de Tacuba en el norte. En sus palabras: “Hemos hecho algunas incursiones por la zona norte, El Naranjito El Sincuyo… Al momento, nosotros como policía, no hemos encontrado estos individuos”.

Lo que sí reconoce, es que en los alrededores sí hay pandilleros: “Estos grupos de pandillas, maras, se concentran afuera del parque. Dentro del parque concretamente no tenemos información que estén dentro. Puede ser que en un momento determinado se crucen. Esa es la información que tenemos”.

La delegación de Ahuachapán en coordinación con Seguridad Pública y “un grupo especial de apoyo” ha estado  trabajando en la zona norte.
Según esas investigaciones, explicó Rivas, hay un grupo de delincuentes integrado por expandilleros en la zona de El Sincuyo, Tacuba. “Pero estamos hablando de delincuencia común ya”, aclara,  “no son pandillas propiamente. Son disidentes de las pandillas ya, que han hecho su bandita, que se mueven en esa zona, más al Norte”.

Sean miembros de pandillas o no, estos individuos son otra amenaza alrededor de  una de las joyas naturales de El Salvador:7 mil manzanas de terreno difícil de custodiar para 12 guardarrecursos y 16 policías.